méxico DF. Mientras las denuncias de irregularidades dominan el debate político en México, el ganador de las elecciones, Enrique Peña Nieto, ya trabaja con miras al próximo 1 de diciembre, cuando asumirá la presidencia del país. El político priista comenzará a reunirse con el actual presidente mexicano, Felipe Calderón, para preparar la transición e impulsar desde ya las reformas estructurales que prometió durante su campaña electoral para cuando comience el próximo periodo legislativo, en septiembre, con el nuevo Congreso que también fue elegido el pasado domingo.
Peña Nieto tendrá que hacer frente también a los izquierdistas del Partido de la Revolución Democrática (PRD), de López Obrador, en el legislativo, ya que se han convertido en la segunda fuerza política del país y su partido, el PRI, no ha logrado la mayoría absoluta en el Congreso. La izquierda tuvo un avance muy importante en las elecciones del pasado domingo, relegando a los conservadores del Partido Acción Nacional (PAN) a la tercera posición, pero no el suficiente para derrotar al favorito desde hace meses: el PRI.
Peña Nieto señaló ayer que emprenderá una reforma laboral, una energética y otra fiscal para modernizar el país. Asimismo, el virtual ganador de la elección presidencial no descartó llamar a miembros de otros partidos políticos e incluso a independientes para su próximo gobierno.