el cairo. El Ejército egipcio se declaró ayer inocente de haber matado a manifestantes cristianos coptos en los disturbios del domingo en El Cairo, que causaron al menos 25 muertos, y acusó a personaliades de esta minoría religiosa de incitar a la violencia. "Hoy estamos frente a una realidad: la policía militar no disparó contra los manifestantes", afirmó en una rueda de prensa el portavoz del Consejo Superior de las Fuerzas Armadas, Adel Emara. Emara agregó que, en el momento de la manifestación de los coptos frente a la sede de la radiotelevisión, "los 300 soldados que protegían este edificio no disponían de armas de fuego".

"¿Quién mató a los que fallecieron durante los sucesos? Esta es la pregunta. Estamos buscando la respuesta, pero ¿son las fuerzas armadas quienes los abatieron? Es seguro que no", explicó Mohamed Hegazi, otro portavoz de la Junta Militar. Apuntó que los detalles respecto a lo que realmente sucedió se darán a conocer cuando termine la investigación iniciada por la justicia militar. Asimismo, Hegazi confirmó que se registraron víctimas mortales entre los militares, aunque no dijo su número.

Frente a esto el presidente de la Organización General de Coptos en Egipto, Sherif Doss, acusó al Ejecutivo de Sharaf de "ser incapaz de controlar los últimos sucesos", por lo que consideró que este ha perdido la confianza de su comunidad.