Jerusalén. Estados Unidos ha condicionado a los palestinos la reactivación del fondo de ayuda de unos 200.000 millones de dólares (casi 150.000 millones de euros) a la revocación de su petición para adherirse a la ONU como Estado miembro u observador.

El congresista estadounidense y representante de los demócratas en el comité de los Asuntos de Oriente Próximo de la Cámara de Representantes, Gary Ackerman, afirmó que si los palestinos "están dispuestos a poner su futuro en manos de la ONU, quizás debería pensar en la cantidad de fondos que sus amigos de Naciones Unidas le suministrarán para acompañar la resolución unilateral de la ONU, carente de sentido, que pueden aprobar". Es más, Ackerman aseguró que la consecuencia final podría llevar a un bloqueo definitivo de los fondos estadounidenses dirigidos a la Autoridad Palestina, si bien las autoridades norteamericanas ya habrían paralizado parte de estos fondos desde el pasado mes de agosto, cuando el presidente palestino, Mahmud Abbas, confirmó que comparecería ante la Asamblea General de la ONU.

Miembros del comité del Senado de Asuntos Exteriores han reafirmado este movimiento norteamericano, en respuesta a la iniciativa palestina y desoyendo las advertencias por parte de Israel de que una suspensión de los fondos podría poner en peligro la cooperación en materia de seguridad entre hebreos y palestinos.