jerusalén. El servicio secreto y de contraespionaje israelí cree que los ultraderechistas judíos que perpetraron los últimos ataques contra grupos pacifistas, civiles palestinos e incluso el Ejército, van tomando el carácter de un grupo terrorista organizado, informó ayer el diario Haaretz. Fuentes del comúnmente conocido como Shabak, o Shin Bet por sus siglas en hebreo, dijeron a ese medio que un estudio de los últimos ataques refleja que cuentan con una actuación jerárquica, organizativa y operativa típica de una "estructura terrorista".

El análisis de los datos sugiere que la llamada "lista de compensación" que un grupo de colonos judíos extremistas aplica hace unos años en represalia por ataques palestinos o la demolición de sus viviendas por el Ejército israelí, comenzó con una acción espontánea por parte de colonos indignados, pero sus métodos han evolucionado. "Ahora actúan en grupos pequeños y estructurados jerárquicamente, y están formados por jóvenes que se conocen personalmente y por ello es muy difícil infiltrar a agentes", anota el diario.

Sólo en la última semana, el grupo radical atacó una mezquita en el distrito cisjordano de Naplusa y una base militar israelí en Cisjordania.

Según el Shabak, los ultraderechistas han mejorado sus tácticas de ataque con la observación y seguimiento previo de blancos potenciales en aldeas palestinas y bases militares, la planificación de vías de escape, y la definición de sus prioridades en un "banco de objetivos". Las fuentes aseguran que se trata de una actividad terrorista a todos los efectos.

Los servicios de inteligencia israelíes siguen atentamente a la extrema derecha especialmente de cerca desde asesinato del primer ministro Isaac Rabin, en 1995.