parís. El ex director gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI) Dominique Strauss-Kahn prestó ayer declaración en calidad de "testigo" dentro de la investigación abierta tras la denuncia por tentativa de violación presentada contra él por una periodista francesa, indicaron sus abogados. La circunstancia de que haya declarado como testigo implica que él mismo habría solicitado comparecer ante los jueces.
El letrado Henri Leclerc precisó que el interrogatorio tuvo lugar dentro del local parisino de la brigada de represión de la delincuencia contra la persona de la Policía Judicial y duró cerca de dos horas.
La justifica francesa abrió el pasado 8 de julio esa investigación preliminar tras la denuncia presentada por la periodista y escritora Tristane Banon, que le acusó de haberla intentado violar en 2003 cuando le entrevistó durante la preparación de un libro.
El economista y político galo, que regresó a Francia el pasado 4 de septiembre después de que un juez neoyorquino le liberara de los cargos penales que había en su contra por una denuncia presentada por abusos sexuales e intento de violación por una empleada de un hotel de esa ciudad, niega los supuestos hechos. Strauss-Kahn ha interpuesto a su vez una querella contra Banon por "denuncia calumniosa", y cuando acabe esta investigación preliminar, sobre la que según Leclerc "no se puede fijar todavía una fecha", le corresponderá al fiscal decidir si da continuación a la misma.
La noticia de la comparecencia del ex responsable del FMI ante el juez coincidió con los resultados de una encuesta de la consultora TNS Sofres que revela que un 63% de los franceses cree que Dominique Strauss-Kahn debería mantenerse al margen de la campaña electoral para las presidenciales de 2012. Los encuestados argumentan que, a pesar de que la Fiscalía de Nueva York retiró los cargos contra él por la supuesta agresión sexual a una empleada del Hotel Sofitel, todavía tiene una causa pendiente en su país, la misma por la que ayer declaró voluntariamente.
Estos escándalos sexuales parecen haber frustrado la carrera política de Strauss-Kahn, quien hace unos meses era el favorito para suceder en el cargo al presidente francés, Nicolas Sarkozy, y devolver el Elíseo a los socialistas. Si bien, estas dos acusaciones no habrían afectado a las posibilidades del Partido Socialista de vencer en estos comicios, ya que el 76% de los consultados cree que su imagen no se ha deteriorado.
