BENGasI. Los rebeldes libios se enfrentaron ayer a las fuerzas del coronel Muamar Gadafi mientras se acercaron a la ciudad de Sirte, el último gran bastión del Gobierno en la costa mediterránea, según informó un portavoz de los sublevados.
Los rebeldes se aproximaron a Sirte, ciudad natal del coronel Gadafi, desde dos puntos distintos y esperan poder negociar la rendición de los combatientes leales al dirigente, aunque afirmaron que éstos juraron luchar hasta la muerte. De momento se desconoce el paradero de Gadafi, aunque se especuló con la posibilidad de que huyera a Sirte, una ciudad de 100.000 habitantes donde viven muchos miembros de su tribu. Las fuerzas de Gadafi se retiraron de las ciudades de Brega y Ras Lanuf (este) esta semana para dirigirse a Sirte y ayer mismo tomaron posición en un lugar conocido como el valle Rojo, a unos 120 kilómetros al este de Sirte, según el portavoz rebelde Mohamad Zawawi. Combatientes de Misrata (en el centro de Libia) se estuvieron desplazando desde el oeste hacia Sirte y se situaron a unos 50 kilómetros de distancia, añadió: "Las fuerzas de Gadafi que están en el valle Rojo nos están disparando cohetes. Muchos de nuestros combatientes están allí con carros de combate y artillería y están construyendo una nueva línea de defensa frente a Bin Jawad", explicó Zawawi en referencia a una localidad que se encuentra en la costa.
depurar trípoli de ratas El líder libio, Muamar Gadafi, hizo ayer un nuevo llamamiento a sus partidarios a que marcharan hacia Trípoli para "depurar" la capital de rebeldes, a los que tachó de "ratas, cruzados e infieles".
En un mensaje de audio difundido por canales de televisión leales, Gadafi se mostró más desafiante que en sus recientes alocuciones. En esta ocasión, llamó a todas las tribus de todo el país a unirse y expulsar a lo que calificó los agentes extranjeros del país. "Libia es para el pueblo libio y no para los agentes, no para el imperialismo, no para Francia, no para (Nicolás) Sarkozy, no para Italia", subrayó. "Trípoli es para vosotros, no para aquellos que confían en la OTAN", añadió. Emulando uno de sus mensajes anteriores tras comenzar las protestas, Muamar Gadafi instó a los jóvenes y a los líderes tribales a tomar el control de sus barrios de manos de los rebeldes y a marchar luego a la capital. "Calle por calle, avenida por avenida, casa por casa", aseveró. "Las tribus que están fuera de Trípoli deben marcha hacia Trípoli. Cada tribu debe controlar su área y evitar que el enemigo ponga sus pies en esta tierra pura", defendió. "Oh jeques de las mezquitas, oh eruditos, incitad al pueblo a la yihad (guerra santa), salid como sus líderes", pidió a los líderes religiosos. "El enemigo es ilusorio, la OTAN se está retirando, no puede seguir para siempre en el aire, la OTAN está condenada", gritó a sus seguidores.