TOKIO. El primer ministro nipón, Naoto Kan, pidió hoy unidad a sus conciudadanos para afrontar las consecuencias del grave terremoto del viernes, que calificó como la peor crisis que afronta Japón desde el final de la II Guerra Mundial.

Kan dijo que la situación es "preocupante", al tiempo que mostró su gratitud y "respeto" por la calma con que la población japonesa ha hecho frente al terremoto, que con 9 grados de magnitud ha sido uno de los más graves de la historia.

"No será fácil, pero superaremos esta crisis, como hemos hecho en el pasado", aseguró el jefe del Gobierno nipón.