Argel, 2 mar (EFE).- Fuerzas leales al líder libio, Muamar el Gadafi, lanzaron hoy un ataque para controlar la ciudad de Briqa, a más de 200 kilómetros al oeste de Bengasi, pero se mantienen sólo en el aeródromo y han sido expulsadas del resto de la ciudad.
Residentes en esa ciudad consultados por las cadenas árabes Arabiya y Al Yazira dijeron que el ataque del Ejército, con apoyo aéreo, comenzó esta madrugada y en él participaron dos batallones de las tropas leales a Gadafi, con apoyo de mercenarios.
Briqa es un importante enclave petrolero que está situado a cerca de 70 kilómetros al oeste de Ajdabiya y a más de 200 al oeste también de Bengasi, la segunda ciudad de Libia y la más importante en poder de las fuerzas de la oposición que se oponen al régimen de Gadafi.
Se trata del primer intento serio por parte del Ejército libio de reconquistar una población de la zona oriental del país, donde diversas ciudades han venido cayendo en poder de los rebeldes en los últimos días.
Un habitante de la localidad de Briqa, identificado sólo como Mahmud, dijo a la cadena de televisión Al Arabiya que unos 200 vehículos militares llegaron a la ciudad, apoyados por tres aviones militares.
Otro residente en Briqa, identificado sólo como Jaled, señaló a la cadena Al Yazira que, a partir de la resistencia montada por los grupos rebeldes, las fuerzas de Gadafi "escaparon" de la ciudad y sólo se han concentrado en el aeródromo de la localidad.
Un periodista de Al Yazira afirmó que para recuperar el control de Briqa fueron desplazadas fuerzas desde Ajdabiya, que esta mañana era escenario también de violentos combates entre las fuerzas de Gadafi y los rebeldes.
Fuentes militares de Bengasi aseguraron también a EFE que sus tropas habían logrado rechazar el ataque de las fuerzas de Gadafi a Briqa y habían conseguido expulsarlas de la ciudad.
Esta ofensiva de las fuerzas leales a Gadafi se produce apenas 24 horas después de que el hijo del mandatario libio Seif el Islam negara en declaraciones al canal británico Sky News que el régimen tuviera intencones de montar una contraofensiva en el este del país. EFE