Washington. Piratas somalíes ejecutaron a los cuatro rehenes estadounidenses que habían sido secuestrados a bordo de un yate en el mar Arábigo, según informaró ayer el Ejército norteamericano, admitiendo que se produjo un tiroteo en el que murieron dos piratas y otros 13 fueron capturados. Los cuatro estadounidenses ejecutados eran Jean y Scott Adam, dueños del yate que habían iniciado un viaje alrededor del mundo en diciembre de 2004, y sus invitados Phyllys Mackay y Rob Riggle.

Los piratas tomaron el control de la embarcación el pasado viernes a 240 millas náuticas de las costas de Omán, y se dirigieron hacia la costa de Somalia. Según el Pentágono, los soldados de la Marina de Guerra de EEUU, que seguían a cierta distancia el yate, se vieron obligados a responder a un tiroteo con los piratas, con los que trataban de negociar.

La secuencia de los hechos no está clara, pero el Mando Central del Ejército estadounidense indicó que los rehenes fueron descubiertos después de que las fuerzas norteamericanas respondieran a disparos y abordaran el yate secuestrado, Quest.

La Marina, por su parte, informó de que hacia la 01.00 de la madrugada hora local (6.00 GMT), mientras las negociaciones estaban en curso para lograr la liberación de los cuatro rehenes, respondieron a los disparos que escucharon a bordo del yate. "Cuando respondieron al tiroteo, llegaron y abordaron el Quest, las fuerzas descubrieron que los cuatro rehenes habían sido ejecutados por sus captores. Pese a las medidas inmediatas para prestarles atención, los cuatro fallecieron por las heridas sufridas", indicó el Mando Central . Pese a las medidas sanitarias adoptadas para intentar reanimarles, los cuatro rehenes murieron a causa de sus heridas.

Hasta 19 piratas Dos piratas murieron durante el enfrentamiento y otros 13 fueron capturados con vida, que se sumaron a otros dos que las fuerzas estadounidenses ya tenían bajo su custodia. En el registro del barco los militares americanos hallaron los cadáveres de otros dos piratas que habían muerto anteriorente. En total, se cree que 19 piratas estaban involucrados en el secuestro.

"Expresamos nuestras más profundas condolencias por las vidas inocentes perdidas cruelmente a bordo del Quest", dijo el general James N. Mattis, comandante del Comando Central de EEUU. Una vez que las fuerzas norteamnericanas supieron del secuestro, cuatro buques de guerra de la Armada se dirigieron al lugar: el portaaviones USS Enterprise (CVN 65), el crucero con misiles guiados USS Leyte del Golfo (CG 55) y los destructores USS Sterett (DDG 104) y Bulkeley USS (DDG 84). Estos barcos están desplegados en la región para dar seguridad marítima y para proporcionar apoyo.