Madrid. La Comisión delegada del Gobierno para situaciones de crisis, presidida por el jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, acordó ayer enviar un avión a Trípoli, capital de Libia, para repatriar a los españoles que se encuentran en el país; y se encargó al ministro de Industria, Turismo y Comercio, Miguel Sebastián, un plan de ahorro energético para que sea aprobado en el Consejo de Ministros del próximo viernes ante la eventualidad de problemas de suministro dada la dependencia energética de España.
Zapatero decidió reunir al gabinete de crisis para estudiar la situación que atraviesa el Magreb y Oriente Medio tras las revueltas y los acontecimientos que se suceden en Libia.
La Comisión, presidida por Zapatero, está compuesta por los tres vicepresidentes, los ministros de Exteriores, Defensa y Fomento (ayer sin José Blanco, de visita oficial en Panamá), el secretario de Estado de Seguridad y el director del Centro Nacional de Inteligencia.
En la reunión, La ministra de Asuntos Exteriores, Trinidad Jiménez expuso un informe detallado de las manifestaciones y los incidentes de los últimos días. Antes de la reunión, Jiménez explicó que el Ministerio está trabajando "intensamente" para localizar a los españoles que se encuentran en Libia y quieren salir del país, de manera que estén agrupados.
Además, ante la presión migratoria que han comenzado a sufrir países como Italia tras las revueltas en el Magreb, el vicepresidente primero y ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, informó al gabinete de crisis de la reunión que mantendrán hoy en Roma los responsables de Interior de los países del sur de la UE.
Así las cosas, tras la reunión fuentes cercanas al Ejecutivo comunicaron que se aprobó el envío de un avión para repatriar a los cerca de 90 ciudadanos españoles localizados que desean regresar. El avión partió hacia Trípoli la pasada noche. Según las cifras aportadas por la ministra de Asuntos exteriortes, cerca de 50 españoles han salido de Libia desde el domingo. En la reunión también se acordó aprobar en el Consejo de Ministros de pasado mañana un "plan de ahorro energético" ante las repercusiones de la crisis libia en el precio de los combustibles.y la puesta en marcha de un plan de ahorro energético que se aprobará el próximo viernes. Por otro lado, el presidente israelí Simon Peres, de visita oficial en España, se mostró "encantado" de presenciar las revueltas en el mundo árabe y confió en que la democracia se extienda por estos países.