El Cairo. La protesta ya no se circunscribe en El Cairo exclusivamente a la plaza Tahrir. Ayer, centenares de manifestantes se dieron cita a las puertas del Parlamento egipcio para proteger a los manifestantes que la noche anterior habían acampado allá eludiendo el cordón dispuesto por el Ejército. El objetivo de este movimiento estratégico es que los legisladores no actúen de espaldas a quienes llevan ya 17 días movilizándose para aumentar así la presión sobre el gabinete de Mubarak. la presencia de una pancarta en la que se puede leer "cerrado hasta la caída del régimen", sintetiza tanto la naturaleza permanente de la acampada, como su fin último: la caída del presidente. Foto: efe