roma. El fiscal de Milán, Edmondo Bruti Liberati, confirmó ayer que el lunes o martes de la próxima semana pedirá al juez el envío inmediato a juicio del primer ministro, Silvio Berlusconi. La Fiscalía de Milán ultima su investigación contra Berlusconi por abuso de poder e incitación a la prostitución de menores, a raíz del llamado caso Ruby, la joven de origen marroquí con la que supuestamente mantuvo relaciones cuando ella era menor de edad.
Estaba previsto que la Fiscalía trasladara la petición de juicio por el procedimiento abreviado esta misma semana, pero se ha pospuesto porque hoy se tiene que pronunciar la Cámara de los Diputados sobre el registro de las oficinas del contable de Il Cavaliere, Giuseppe Spinelli, donde se supone que hay material que documenta los pagos hechos por Berlusconi a las jóvenes asiduas a sus fiestas. El despacho del contable no ha podido ser registrado hasta ahora, ya que goza de inmunidad parlamentaria, al ser considerado una oficina de la secretaría política del diputado Berlusconi.
Los fiscales ya interrogaron a la consejera regional de Lombardía, Nicole Minetti, de 25 años, asimismo investigada por presunta inducción a la prostitución en el caso Ruby. Minetti se acogió en varias ocasiones al derecho de no responder.
respuesta Pese a la situación delicada en la que se encuentra, Berlusconi no pierde su arrogancia. Así ayer el primer ministro italiano atacó de nuevo a los jueces diciendo que "la magistratura se ha convertido en un poder indecente" y sostuvo que las acusaciones interpuestas contra él por la Fiscalía de Milán son "infundadas y ridículas".
Según Berlusconi, las acusaciones son "invenciones", y aseguró que la Fiscalía "no es competente" para investigarle, lo que supone "una violación del sistema legal muy grave". A pesar de que la oposición ha pedido su dimisión desde que salió a la luz el escándalo Ruby, Berlusconi afirmó que unas elecciones serían "un daño para el país" porque lo sometería "a un periodo de inestablidad". Sin embargo, el primer ministro se mostró seguro de que, en caso de volver a las urnas, el Gobierno sería "de centro derecha" pero con una situación "idéntica o empeorada después de cinco meses de inestabilidad".
En realidad, un sondeo de La Repubblica y realizado por IprMarketing señala que el partido de Berlusconi, Pueblo de la Libertad, conseguiría un 25% de los votos en unas posibles elecciones, mientras que su aliado, la Liga Norte, alcanzaría un 12% de votos, lo que le daría una victoria del 37% frente a sus opositores. No obstante, la confianza en el primer ministro baja 5 puntos.