El presidente egipcio, Hosni Mubarak, pidió a su nuevo primer ministro, Ahmed Shafiq, que dialogue con la oposición para promover la democracia en el país, en un mensaje televisivo emitido la noche del domingo.

El mandatario egipcio, en el poder desde 1981, intenta de este modo aplacar la creciente contestación de los ciudadanos contra su régimen en las principales ciudades del país, desde que el pasado martes comenzaron las manifestaciones.

Mientras, la fragmentada oposición egipcia dio este domingo pasos decisivos para prepararse ante un eventual cambio de régimen, con la presencia por primera vez del premio Nobel de la Paz Mohamed El Baradei en la céntrica plaza Tahrir, epicentro de la protesta, y la creación de un comité con los militares para negociar la transición.

Asimismo, la Policía volvió hoy a las calles de El Cairo para evitar los actos de pillaje y vandalismo, aunque la principal plaza cariota continúa bajo vigilancia de los militares.

Al menos 102 personas han muerto y mas de mil han resultado heridas desde que miles de egipcios salieron a las calles para pedir la dimisión de Mubarak.