Madrid. La Sala de lo Contencioso-Administrativo de la Audiencia Nacional ordenó ayer paralizar la expulsión del Estado español de 17 saharauis que llegaron en patera a Fuerteventura el pasado 5 de enero hasta que resuelva el recurso que interpusieron los afectados contra la decisión del Gobierno de devolverlos a su lugar de origen. La decisión del tribunal se ha producido después de que la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR) denunciara que "previsiblemente se está preparando" la expulsión de los saharauis, ya que en las últimas horas fueron trasladados desde Fuerteventura a un Centro de Internamiento para Extranjeros (CIE) de Gran Canaria. CEAR denunció que el traslado de los saharauis podía obedecer al propósito de "acceder de una manera más fácil a las líneas aéreas y a los vuelos que puedan existir con El Aaiún", adonde hipotéticamente serían enviados. Por ello, el tribunal acordó "que se suspenda de inmediato cualquier actividad material de ejecución de la expulsión".
El principal argumento de los saharauis para pedir el asilo es el "alto riesgo" que corren todos si vuelven a El Aaiún, motivo en el que se han basado para reclamar a la Audiencia Nacional la aplicación de una "medida cautelarísima" de suspensión de los trámites de expulsión antes de entrar a pronunciarse sobre el fondo de las solicitudes de los 17 afectados. El recurso ante la Audiencia Nacional fue interpuesto a raíz de que el Gobierno español rechazara las peticiones de asilo de esos 17 saharauis, miembros de un grupo de 22 personas llegadas el 5 de enero a Fuerteventura en una lancha neumática y entre las cuales cinco sí han conseguido que se tramiten sus solicitudes de refugio.
Según el presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, el Ministerio del Interior denegó las 17 solicitudes de asilo de los saharauis porque no se ha podido acreditar que sufran "persecución individualizada" por parte de Marruecos. En la sesión de control al Gobierno en el Congreso de los Diputados, Zapatero respondió una pregunta del portavoz de EAJ/PNV, Josu Erkoreka, que le pidió "rectificar" esa decisión porque todos huyeron de un territorio donde se han acreditado "objetivamente" persecuciones y torturas. Al respecto, Zapatero alegó la aplicación de la Ley de Asilo para argumentar que cinco solicitudes hayan sido admitidas a trámite y otras 17 hayan sido denegadas.
Satisfacción en EAJ/PNV Horas después de interpelar al presidente del Gobierno español, Erkoreka celebró la decisión adoptada por la Audiencia Nacional. "Una de las cosas que le pedía a Zapatero esta mañana es que paralizase, en la medida en la que estuviera al alcance de su mano, la expulsión de los saharauis a los que no se les había admitido la solicitud de asilo. Parece que se ve en una realidad, con lo cual es un motivo de felicitación", agregó. Igualmente, Erkoreka insistió en que el presidente no debe dar "tan descaradamente la razón" a quienes creen que el Gobierno complace a Marruecos al no sospechar que en estos 17 casos se han vulnerado derechos fundamentales.
Mientras, fuentes del Ministerio del Interior aseguraron a Efe que la hipotética expulsión de estos saharauis no se llevará a cabo en ningún caso hasta que se pronuncie la Audiencia Nacional. Estas mismas fuentes eludieron pronunciarse sobre los motivos de su traslado al Centro de Internamiento de Extranjeros de Gran Canaria.
