ROMA. Según la acusación, la noche del 27 y 28 de mayo de 2010, Berlusconi habría abusado de su calidad de primer ministro para inducir a los funcionrios de la Policía de Milán a confiar la tutela de la menor a la consejera regional del partido gubernamental Pueblo de la Libertad, Nicole Minetti.

La Fiscalía de Milán ha acusado a Berlusconi de intentar ocultar sus relaciones con una prostituta menor de edad en las fiestas celebradas en numerosos fines de semana en su villa de Arcore e intentar evitar las investigaciones sobre sus supuestas fiestas en la famosa villa.

El Código Penal italiano impone una pena de cuatro a doce años por el delito de soborno a cualquier funcionario que, abusando de su calidad o de su poder, obligue o induce a prometer indebidamente a un tercero dinero "u otros bienes".

Al 'premier' se le incluiría el agravante del delito de "prostitución de menores" que impone cárcel de seis meses a dos años a quienes realicen actos sexuales con un menor a cambio de dinero o de otros bienes económicos.

Las investigaciones sobre el 'caso Ruby' han llevado a la Fiscalía de Milán a registrar el apartamento y la oficina del hombre de confianza de Berlusconi, Giusseppe Spinelli, quien administra también las finanzas del 'premier'.

Entre los investigados se encuentran también el manager Lele Mora y el periodista Emilio Fede y la consejera regional Nicole Minetti, cuyas oficinas han sido registradas por favorecer "la prostitución adulta o menor" en las fiestas de la villa Arcore.

Berlusconi tiene abiertos otros tres procesos interpuestos contra él por la Fiscalía de Milán, el llamado 'caso Mills' por sobornar al abogado británico David Mills para que declarara en su favor en un juicio, y los procesos contra Mediaset y Mediatrade por fraude fiscal.

PROCESOS INVENTADOS Respecto a estos procesos, Berlusconi ha señalado en una entrevista concedida al programa matutino de Canale 5 que se trata de casos "absolutaente inventados, ridículos y grotescos" y que ya ha asegurado "ante todos" que estos hechos "no existen", por lo que "no pueden condenarle" por ellos.

'Il Cavaliere' se muestra optimista pero advierte de que "si entre los jueces que le juzgan hay algún juez de izquierda" irá a la televisión "y explicará de qué cosa se trata". En opinión del primer ministro "no es posible encontrar jueces que osen imponer una condena sobre hechos que no existen".

Por otra parte, el primer ministro ha declarado que el veredicto publicado este jueves por el Tribunal Constitucional, en el que otorgaba una inmunidad "parcial" al primer ministro, "ha mejorado la situación precedente" y que "no influirá en el Gobierno".

El Constitucional italiano hizo pública este jueves la sentencia por la cual considera ilegítimo "en parte" el decreto impulsado por el ministro de Justicia, Angelino Alfano, que concede la inmunidad ante los tribunales a Berlusconi y otros altos cargos públicos.

Según la sentencia, Berlusconi y los otros altos cargos podrán alegar "problemas de agenda por compromisos oficiales" para no acudir a los juicios, aunque serán los propios jueces ordinarios a decidir si son "legítimos" estos compromisos. El primer ministro se acogió a estos "problemas de agenda" para no acudir a los tres procesos interpuestos contra él y así poder "suspender" el proceso de forma indefinida.