Roma. Un artefacto explosivo fue hallado y desactivado ayer nuevamente en una embajada en Roma, en este caso en la de Grecia, sólo cuatro días después de que sendos paquetes bomba explotaran en las legaciones de Chile y Suiza, hiriendo de gravedad a dos personas.
Tras los ataques del pasado jueves, la capital italiana volvió ayer a vivir una mañana de tensión a la que contribuyeron una decena de falsas alarmas por la recepción de paquetes sospechosos en las embajadas del Principado de Mónaco, Venezuela, Dinamarca, Kuwait, Albania, Egipto y Eslovenia.
Todos ellos resultaron ser agendas o felicitaciones navideñas a excepción del paquete explosivo hallado en la embajada de Grecia, que llegó el pasado viernes en un sobre amarillo de los utilizados para embalar objetos frágiles y que estaba listo para estallar en cuanto fuera abierto.
Por otra parte, dos falsas alarmas de bomba se registraron ayer en las embajadas de Finlandia ante la Santa Sede y de Albania ante Italia, en Roma, al suscitar sospechas dos paquetes que resultaron ser, tras la intervención de los artificieros, regalos de Navidad, informó la Policía.
Poco después de que se conociera que había sido desactivado un artefacto explosivo en la embajada de Grecia en Roma, empleados de las embajadas de Finlandia ante el Vaticano, ubicada en la colina del Janiculo (Giannicolo), y de Albania, en Vía Asmara, sospecharon de sendos paquetes recibidos.
Llamada la Policía, los artificieros aislaron y acordonaron la zona y procedieron a controlar los paquetes, descubriendo que el envío a la legación finlandesa era una agenda para el año 2011 y el de la sede albanesa era un calendario.
Las embajadas en Roma se encuentran en alerta desde el jueves pasado y la Policía italiana, mantiene abierto un importante operativo para vigilar las legaciones de la capital.