Fundador y Director de Wikileaks
PARA sus seguidores, el fundador de la plataforma Wikileaks, Julian Assange, es un valiente luchador por la verdad y la justicia. Las denuncias de violación y la orden de detención desde Suecia son, desde su punto de vista, son sólo un intento de causar daño a Wikileaks. En cambio, los funcionarios del Gobierno estadounidense ven a Assange como un criminal adicto a la publicidad que con la difusión de documentos militares secretos pone en peligro la vida de soldados y civiles en Irak y Afganistán. Sin embargo, con su estilo autoritario, el australiano de 39 años también genera controversia al interior de Wikileaks. Julian Assange nació en 1971 en Townsville, una localidad en el norte de Australia. Durante su infancia se mudó varias veces con sus padres, que dirigían un teatro ambulante. Desde joven se interesó por la informática y las redes online y, a los 24 años, tuvo su primer conflicto con las autoridades cuando lo acusaron, junto con algunos de sus amigos "hackers", de haber ingresado en redes protegidas. En 2006, Assange fundó, también junto a sus amigos, la plataforma de internet Wikileaks. La idea era crear una especie de buzón en el que se pudieran introducir anónimamente documentos sobre irregularidades y escándalos de interés público. El material lo reciben de informantes anónimos y periodistas y son bloggeros, al parecer, los encargados de analizar los documentos y publicarlos si así lo consideran. El nombre fue escogido para que recuerde a la enciclopedia en la red creada con contribuciones de los usuarios Wikipedia. El término en inglés "leak" significa "filtración" y "wiki" significa rápido en hawaiano. Assange y Wikileaks ocuparon por primera los titulares de los medios internacionales con la difusión de un vídeo filmado desde un helicóptero estadounidense en Irak en el que se puede observar el asesinato de civiles. Desde entonces, Assange vive haciendo maletas y pasa con frecuencia las noches en casa de amigos y conocidos por temor a conspiraciones, ya que cree que se encuentra en la mira de los servicios secretos. Los observadores atribuyen a Assange un gran carisma que entusiasma a sus seguidores. En el entorno de Wikileaks, las acusaciones de violaciones desde Suecia son descritas con frecuencia como parte de una campaña desde Estados Unidos con la que se intenta tapar la boca a una voz crítica. Pero el "affaire" en Suecia encendió también dentro de Wikileaks una discusión sobre el estilo de liderazgo de Assange. Así, el ex portavoz de la plataforma, Daniel Domscheit-Berg, pidió este año al australiano suspender su liderazgo hasta que no se aclaren las denuncias. "Las investigaciones contra Julian en Suecia son, desde mi punto de vista, un ataque personal a él, pero no tienen nada que ver con Wikileaks", dijo Domscheit-Berg a la revista alemana "Spiegel", después de haber sido "suspendido" por Assange.
"Él vio mi propuesta interna como un ataque a su rol", agregó. Domscheit-Berg y otros activistas de Wikileaks temen, además, que la plataforma se centre demasiado en megaproyectos en torno a las guerras en Irak y Afganistán, mientras que documentos más pequeños a nivel nacional sean desatendidos. "He intentado proponerlo varias veces, pero Julian Assange reaccionó a cada crítica con la denuncia de que soy desleal al proyecto".