KATMANDU. Alrededor de 2.000 turistas extranjeros y sus 'sherpas' se encuentran atrapados en el pequeño pueblo de Lukla, en las faldas de una montaña cercana al Everest y a 2.800 metros de altura, debido al mal tiempo. Helicópteros del Ejército nepalí están comenzando a trasladar a los visitantes a lugares más seguros.
Miles de senderistas y alpinistas visitan cada año la región de Solujumbu, en el este de Nepal cada año. Muchos comienzan su travesía desde el pueblo de Lukla, donde se encuentra un pequeño aeródromo en la escarpada montaña.
Las autoridades metereológicas de Katmandú informaron de que la zona está siendo afectada por nubes bajas y fuertes vientos desde los últimos tres a cinco días, haciendo que los vuelos de los pequeños aviones de hélices sean difíciles y peligrosos.
"Los vuelos con helicópteros particulares son inadecuados y sus tarifas están fuera de alcance del presupuesto de los senderistas", explicó un miembro de la Asociación de la Agencia de Senderismo de Nepal, Mahendra Singh Thapa.
El jefe de la Asociación de Rescate del Himalaya, Bikram Neupane, informó de que todos los turistas están bien y fuera de peligro. "No pueden coger los vuelos de retorno a Kathmandú por el mal tiempo", añadió Neupane, en declaraciones a la agencia Reuters.