Jerusalén. Otra nave solidaria con nueve tripulantes de varias organizaciones judías que se dirigía a la Franja fue abordado ayer por la Marina israelí en aguas internacionales. Esta vez no han sido "activistas vinculados a Hamás", como proclamaron algunas voces sionistas tras la tragedia del Mavi Marmara. En esta ocasión, en la nave de solidaridad que viajaba bajo bandera británica navegaban nueve activistas judíos, entre los que se encuentran Reuven Moskovitz (Israel), un superviviente del Holocausto de 82 años, además de Rami Elhanan (Israel), que perdió a su hija en un atentado suicida en 1997 y fundador de una asociación que aglutina a israelíes y palestinos que han perdido a sus familiares en este conflicto; Lilian Rosengarten (EEUU), que fue refugiada durante la Alemania Nazi; Yonatan Shapira (Israel), ex piloto de las Fuerzas Aéreas israelíes y ahora activista de Combatientes por la Paz; Glyn Secker (Reino Unido), capitán del barco y miembro del comité ejecutivo de Judíos por la Justicia para Palestina, una organización de la que también es una activa miembro Marion Kozakla, madre del nuevo líder laborista Ed Milliband, Dr. Edith Lutz (Alemania), Itamar Shapira (Israel), así como los reporteros Eli Osherov (Israel) de Channel 10 News y Vish Vishvanath (Israel), fotógrafo freelance.

El catamarán Irene, que ayer fue desviado por la marina israelí al puerto de Ashdod cuando se encontraba a menos de 20 millas de las costas de Gaza, partió el pasado domingo desde Famagusa (Chipre) con lo que los organizadores calificaron de ayuda "simbólica" para los gazatíes en forma de juguetes, instrumentos musicales, redes de pesca y libros de texto. Durante semanas han navegado esperando el momento oportuno para encaminarse a Gaza, superando importantes problemas técnicos con la nave y manteniéndose discretos para evitar posibles sabotajes.

"nos pidieron que viráramos" Según declaró ayer a Radio Israel Rami Elhanan, uno de los activistas a bordo, dos barcos de la Marina escoltaron al Irene durante media hora y aunque a lo lejos les seguían unos cuantos más. "El Ejército entró en contacto con el capitán y le preguntó adónde nos dirigíamos", explicó Elhanan. "La Marina nos pidió que viráramos el barco hacia la derecha a partir de cinco millas, y accedimos a ello", indicó el activista.

Este es el tercer intento de grupos de activistas internacionales de romper el bloqueo marítimo que Israel impone a Gaza desde 2006, pero el primero realizado por los propios israelíes. Son judíos que no se sienten representados por el gobierno del Estado sionista de Israel y que a pesar de ser víctimas del Holocausto o de los atentados de las milicias armadas palestinas, consideran que "el bloqueo a Gaza y la ocupación son inhumanos y están en contra de cualquier valor universal, moral o judío". "Las políticas de Israel hacia Gaza son crudas, inhumanas y contraproducentes. Alientan la furia de los palestinos y quienes les apoyan por todo el mundo", señalan.