KARACHI. El representante especial de Estados Unidos para Afganistán y Pakistán, Richard Holbrooke, ha advertido este jueves de que la comunidad internacional no va a poder reunir todo el dinero que se necesita para reconstruir Pakistán tras las inundaciones y que el Gobierno de este país tendrá que ingeniárselas para conseguirlo.
Las inundaciones, provocadas por las intensas lluvias monzónicas de finales del pasado julio, se han cobrado la vida de más de 1.700 personas, han obligado a otros diez millones a abandonar sus hogares y han causado unos daños valorados en hasta 43.000 millones de dólares (casi 33.000 millones de euros).
"La comunidad internacional no va a ser capaz de recaudar decenas de miles de millones de dólares", aseguró Holbrooke durante una reunión con directores de periódicos en la ciudad de Karachi, en el sur de Pakistán. "Vosotros tenéis que encontrar la manera de conseguir el dinero", añadió.
Las inundaciones "van a poner a prueba a vuestro Gobierno", señaló. El agua de la lluvia se ha llevado por delante casas, carreteras, puentes, campos de cultivo y ganado, ocasionando uno de los peores desastres naturales sufridos por Pakistán. La economía nacional ya era débil antes, y el coste de la rehabilitación probablemente elevará el déficit fiscal de 2010-2011 a entre un 6 y un 7 por ciento del PIB (el objetivo inicial era un 4 por ciento).
El ratio de los impuestos en relación al PIB en Pakistán es de alrededor del 10 por ciento, uno de los más bajos en el mundo, y, aunque el Gobierno ha pedido una mayor recaudación de ingresos, ha hecho poco para ampliar una base imponible muy estrecha.
AYUDA DEL FMI Y DE LA ONU
El Fondo Monetario Internacional (FMI) aprobó este miércoles destinar 451 millones de dólares (más de 344 millones de euros) en fondos de emergencia para contribuir a la reconstrucción de Pakistán, una suma que es independiente del programa económico con apoyo del FMI acordado en 2008 y valorado en 11.000 millones de dólares (casi 8.400 millones de euros).
El programa del FMI incluye reformas en el sector de la energía y medidas para aumentar los ingresos del Estado. Si Pakistán no incrementa sus ingresos fiscales y elimina los subsidios al sector energético para reducir sus gastos, podría no recibir más fondos del FMI en el futuro.
Por ahora, lo prioritario es asistir a las víctimas de las inundaciones, diez millones de las cuales necesitan urgentemente comida y refugio. Las organizaciones de ayuda humanitaria han advertido de que el hambre y las enfermedades que se transmiten por el agua podrían causar muchas más muertes.
"Nunca he visto nada de esta magnitud", reconoció Holbrooke, que ha visitado zonas afectadas por el desastre, en un encuentro con el Consejo Empresarial Americano. "Esto es lo que tenemos que hacer llegar a la comunidad internacional. Lo que más me preocupa es la fase de reconstrucción", agregó.
La ONU dice que ha recibido 307 millones de dólares (más de 234 millones de euros), es decir, aproximadamente un 67 por ciento de la cantidad que solicitó el pasado agosto (460 millones de dólares o 351 millones de euros) en concepto de ayuda de emergencia para Pakistán. Tiene previsto realizar un nuevo llamamiento esta semana en Nueva York.
Estados Unidos, que quiere asegurarse de que las inundaciones no contribuyen a generar una mayor desestabilización política en el país asiático, se ha colocado a la cabeza de los países que están proporcionando asistencia de emergencia, contribuyendo con 261 millones de dólares (199 millones de euros), entre ayuda directa y seguridad.