La iglesia de Bélgica tiene cierto temor a tener que pagar compensaciones económicas ante los cientos de casos de pederastia por parte de varios curas en los años sesenta, setenta y ochenta, si pide una disculpa completa a los afectados. "Si hacemos un mea culpa, somos moralmente responsables, y la gente vendrá a pedir dinero", indicó el obispo Guy Harpigny, portavoz de los obispos de Bélgica sobre los temas relacionados con los abusos, a la cadena Radio 1 de ese país. "Tenemos miedo. ¿Quién pedirá: las víctimas, el tribunal o alguien más? Por eso estamos siendo tan cautos", añadió. El lunes la Iglesia de Bélgica anunció la creación de un centro de reconciliación para apoyar a las víctimas, pero la asociación de afectados por los casos de abusos rechazaron la oferta y la calificaron de "vaga".