MADRID. El secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen, ha definido este viernes el atentado en el que murieron dos guardias civiles el pasado 25 de agosto como un "incidente" y ha explicado que se trató de un policía afgano, que estaba recibiendo formación y volvió sus armas contra los instructores.

"Es un acontecimiento trágico pero es un acontecimiento aislado", añadió Rasmussen, que subrayó que en Afganistán "no se producen demasiados" incidentes.

Tras el atentado, el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, había señalado que la muerte de los dos guardias civiles en Qala e Now fue "un atentado premeditado" obra del conductor de un responsable policial.

Por otra parte, Rasmussen, que se entrevistará este mediodía con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha avanzado que pedirá a España como a otros países aliados que envíen más instructores a Afganistán, puesto que, según él, la formación de las fuerzas de seguridad afganas "es la vía correcta" para defenderse de los talibán y Al Qaeda.

Asimismo, ha considerado que las fuerzas de la Alianza tienen que ganarse la mente y los corazones del pueblo afgano, también con el "uso ocasional de la fuerza militar".