SIDNEY. La oposición conservadora, liderada por Tony Abbott, aventaja en tres escaños al Partido Liberal de la primera ministra de Australia, Julia Gillard, según el recuento provisional de los votos de las elecciones celebradas hoy.

Con el 75,3 por ciento de los sufragios escrutados, la coalición formada por los partidos Liberal y Nacional ha obtenido 73 escaños hasta el momento y 70 asientos la formación gobernante de centroizquierda, de acuerdo a los datos ofrecidos por la cadena de televisión ABC.

En una comparecencia ante la prensa en Melburne, la primera ministra indicó que "la gente ha hablado, pero se tardará un rato en determinar qué es lo que ha dicho", con lo que hizo suyas unas palabras pronunciadas hace tiempo por el ex presidente estadounidense Bill Clinton.

Gillard felicitó al Partido Verde, que por vez primera en su historia ha conseguido un escaño en el Parlamento.

Otros cuatro asientos de la cámara baja serán para candidatos independentes.

Queda aún por saber quiénes son los ganadores de otros dos escaños del total de 150 que componen el Parlamento federal.

La poca diferencia que arrojaron las últimas encuestas llevaron a que tanto Gillard como su contrincante, el candidato de la oposición conservadora Tony Abbott, hicieran campaña hasta el último momento.

Ambos empezaron la jornada en Sídney, cuyas circunscripciones del oeste pueden convertirse en claves para el resultado, ya que ninguna de las dos principales fuerzas políticas cuentan con un sustancial apoyo del electorado.

Cerca de 14 millones de australianos fueron llamados a las urnas para votar en unos comicios que han sido considerados los más reñidos en medio siglo y en los que unos 1.200 candidatos pugnaron por los escaños del Parlamento.