nueva york. Un congresista del Partido Demócrata cuestionó un informe científico avalado por la Casa Blanca que indicaba que tres cuartas partes del vertido de petróleo que ha contaminado el Golfo de México a causa del accidente en la plataforma de BP se habían limpiado o eliminado, después de que un experto del Gobierno hubiera reconocido que el informe se hizo con prisa y no fue sometido a una revisión científica completa.

El estudio fue publicado por la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA) y respaldado por la principal asesora de la Casa Blanca, Carol Browner, en una rueda de prensa el pasado 4 de agosto. Desde entonces, varios científicos han puesto en duda las conclusiones de la NOAA, y un equipo de la Institución Oceanográfica de Woods Hole dijo este jueves que hay pruebas de que aún hay una gran columna de petróleo bajo la superficie del agua.

Durante una sesión celebrada el jueves y presidida por Ed Markey, miembro de la Cámara de Representantes, éste declaró: "La gente quiere creer que todo va bien, y creo que este informe y la forma en que se está discutiendo está dando a muchas personas una falsa sensación de confianza respecto al estado del Golfo".

Bill Lehr, científico de la NOAA, explicó a la comisión presidida por Markey que el informe aún no ha sido revisado por otros expertos porque "la prioridad era dar una respuesta lo antes posible al mando de incidentes".

La revisión "se ha retrasado una semana porque he tenido que venir aquí", añadió Lehr, citado por el diario The Wall Street Journal. "Esperamos sacarla dentro de dos meses", precisó. Pero Markey reprendió al científico por el retraso y criticó al Gobierno por dar un "giro optimista" a las conclusiones del informe. Según éste, de los 4,9 millones de barriles de petróleo que salieron del pozo roto, el 17% se recogió antes de que saliese al océano, el 8% fue quemado o recogido en la superficie, una cuarta parte se dispersó de forma natural o por medios químicos y otro 25% se ha evaporado o disuelto.