PARÍS. La huelga de los controladores en Francia, convocada por los sindicatos CGT, FO, UNSA y CGC, desde hoy, martes 23, hasta el próximo sábado, día 27, podría obligar a las aerolíneas a cancelar el 50% de sus vuelos en Orly y el 25% en el aeropuerto de Roissy-Charles de Gaulle, en su primer día de paros.

La Dirección General de la Aviación Civil (DGAC) señaló en un comunicado que ha solicitado a las aerolíneas que operan en los dos aeropuertos parisinos que reduzcan sus operaciones, un 50% en Orly y un 25% en Roissy, para evitar problemas en el tráfico aéreo, que serán "particularmente sensibles" en los dos aeropuertos de la capital.

Asimismo, recomendó a los pasajeros que vayan a volar durante los cinco días de paros que se informen previamente de sus vuelos poniéndose en contacto con las aerolíneas respectivas para evitar desplazamientos innecesarios a los aeropuertos.

Los sindicatos quieren denunciar la situación laboral del colectivo, ante el temor a recortes de empleo como parte de la creación un organismo europeo de control de tráfico aéreo, firmado en 2008 y en el que se integran Bélgica, Francia, Luxemburgo, Países Bajos y Suiza, con el que se busca modernizar la gestión del tráfico aéreo en dicha región.

El Gobierno francés está inmerso en una reforma de control aéreo para aumentar la productividad, que ya suscitó una huelga por parte del colectivo en enero, y que causó la cancelación del 40% de los vuelos en los principales aeropuertos de París.

El colectivo denuncia que a la fuerte reducción de la plantilla ya prevista para 2010 y 2011, el Gobierno quiere aplicar nuevas medidas en el marco de una revisión general de las políticas públicas que afectará al sector.

El Tribunal de Cuentas de Francia reveló recientemente que los controladores aéreos franceses trabajan una media de 100 días menos al año, frente a otros profesionales de Eurocontrol, además de realizar largas jornadas, lo que plantea dudas sobre la seguridad del servicio, y cobrar salarios "muy elevados", lo que supone un "nivel de productividad extremadamente bajo".

Según el informe, durante 2008, los 4.315 controladores franceses trabajaron una media de 20 semanas (99 días), incluyendo días de formación, con una media de 483,84 horas al año.