SIDNEY. Un iceberg de 140 kilómetros cuadrados, que se desprendió de la Antártida, se dirige hoy hacia el sur de Australia y ofrece un espectáculo que los entendidos califican de "una vez en la vida".

El científico Neal Young señaló que se trata de un fenómeno "muy raro, poco común, pero no inusual, puede pasar mucho tiempo antes de que aparezca uno así, por lo que se trata de una visión que sólo se produce una vez en la vida".

Los expertos han llamado al hielo gigante B17B, tiene 19 kilómetros de largo y 8 kilómetros de ancho, y es uno de los mayores que se recuerdan cerca de Australia.

La pieza forma parte de un iceberg tres veces su tamaño que se desprendió de la Antártida en 2000 y se pasó cinco años quieto en un lugar a causa de las corrientes oceánicas en esa región.

Los científicos como Young prevén que B17B se resquebraje en su avance hacia el litoral australiano.