TEHERÁN.Las autoridades iraníes consideraron hoy sábado que es necesario construir hasta 20 plantas de enriquecimiento de uranio para proporcionar el combustible que requieren sus nuevas plantas nucleares, si bien insisten en que este nuevo impulso de su programa atómico no implica en absoluto que vaya a abandonar el Tratado de No Proliferación de Armas Nucleares.
Así se pronunció el jefe de la Organización Nuclear de Irán, Ali Akhbar Salehi, a la agencia oficial iraní IRNA, donde ratificó que "no existen planes para salir del Tratado de No Proliferación" que regula la posesión de armas de destrucción masiva, que según gran parte de la comunidad internacional es el propósito final del programa nuclear de Irán, algo que la República Islámica viene desmintiendo categóricamente desde hace años.
Teherán mientras, sigue con la construcción de la decena de plantas de enriquecimiento adicionales, de las que informará a la Agencia Internaconal de Energía Atómica (AIEA) sólo seis meses antes de inyectar gas a las instalaciones, según indicó este viernes la agencia oficial iraní IRNA.
Irán anunció el pasado domingo, en represalia por la resolución de la semana pasada de la AIEA, que construirá diez plantas más de enriquecimento de uranio como la de Natanz, supervisada por la agencia internacional. La resolución de la AIEA censuraba a Irán por haber construido en secreto una segunda planta de enriquecimiento de uranio cerca de la ciudad de Qom, pidiendo que se suspendiera su construcción.