ablar de Ara Malikian es hablar de un artista que no lo ha tenido fácil. Es hablar de un grandísimo violinista que pese a su situación, en su más tierna e inocente infancia se refugiaba en el sonido de su violín para tapar el que emitían los bombardeos de la guerra civil que azotaba a su país, el Líbano. Hablar de Ara Malikian es hablar de una persona que peleó por un sueño, como tantos otros hicieron, pero que tuvo la suerte, esa que siempre nos tiene que coger preparados, para conseguir dar el salto a una vida mejor.

El músico libanés nació en Beirut en 1968, sin saber que siete años después, su vida cambiaría. En 1975 estalló la guerra civil en el Líbano y Ara Malikian tan sólo tenía 7 años. Hagamos un retroceso en nuestra memoria para recordar cómo era nuestra situación con esa misma edad. Nadie se puede poner en su piel, ni en la suya ni en la de millones de jóvenes inocentes, niños y niñas que tienen que vivir por desgracia. Guerras hechas por adultos en sus lujosos despachos y que sufren en primera línea jóvenes, mujeres, niños y niñas.

Pese a todo, pese a los bombardeos y pese al desconcierto de no saber cuándo acabaría todo aquello, el joven Ara encontró su refugio en la música, en su violín. Muy pronto se vio que aquello no era broma, que no era un juego o una simple diversión de un niño que trataba de convertir las bombas en tambores de fondo que retumbaban en su orquesta imaginaria. La guerra en el Líbano duró 15 años, hasta 1990. Malikian, por su parte, junto a su familia armenia fue poco a poco mejorando sus destrezas con el violín estudiando en muchos ocasiones y por largos periodos en refugios antiaéreos. Como decimos es imposible ponerse en la piel de ese niño que dio su primer concierto con 12 años en plena guerra civil libanesa.

Tras esto, con 14 años la suerte llamó a su puerta pero como hemos dicho al principio la oportunidad le llegó pero no solo le cogió con las ganas de dedicarse a la música sino con un trabajo realizado muy grande. Cuando la guerra había llegado a su séptimo aniversario el director de orquesta Hans Herbert-Jöris le escuchó y consiguió para él una beca del Gobierno alemán para cursar estudios en la Hochschule für Musik und Theater Hannover. De esta manera, el músico libanés con apenas 15 años se convirtió en el alumno más joven de la toda la historia admitido en este prestigioso centro superior de estudios musicales.

“Yo también fui refugiado y pude salir de mi país, el Líbano, porque Alemania me ayudó a salir adelante”, confesó Ara Malikian en 2016 en Valencia cuando presentaba su gira de 15 conciertos, en el que donaría un euro de cada entrada de las últimas cinco actuaciones a la ONG Acción contra el Hambre. En aquella presentación además, se mostraba -siempre lo ha hecho- muy crítico contra la inacción de los gobiernos europeos con el tema, para mucho tabú, de los refugiados.

Tras su experiencia en Alemania se trasladó a Londres para ampliar su formación y seguir creciendo como artista. En esta ocasión amplió sus estudios en la Guildhall School of Music and Drama de Londres, además de recibir lecciones de algunos de los más prestigiosos profesores del mundo como Franco Gulli, Ruggiero Ricci, Ivry Gitlis, Herman Krebbers o miembros del Alban Berg Quartet. Ara Malikian lo tenía claro, quería dedicarse a la música y dar vida a su vida a través de las cuerdas del violín pero a su estilo.

Los que han ido a sus conciertos aseguran que no es lo típico y que salen del mismo diferentes. El músico libanés intercala estilos en el escenario y al mismo tiempo cuenta, en perfecto castellano, su historia. Respecto a los idiomas es curioso ver como habla siete perfectamente pero reconoce que lo hace “por necesidad”. Sabe armenio, castellano, inglés, alemán, árabe, francés e italiano y con su música y el violín trata de explicar su vida.

En cuanto a su estilo musical podemos encontrar de todo. Hay flamenco, tango, rock, clásico, jazz... todo a su manera. Siempre ha mostrado un gran interés por la música y por el ser humano y esto le ha hecho sumergirse en sus propias raíces armenias, así como en tratar de interiorizar otras culturas o estilos como el árabe, la judía, la gitana, la klezmer, el flamenco o el tango.

Ara Malikian reside en Madrid está casado con la actriz, guionista y realizadora Nata Moreno. Por ello, vive en España y entre otros premios en 2018 fue nombrado el hijo adoptivo de la ciudad de Zaragoza, de donde es natural su esposa. Por otro lado, en cuanto a su discografía su primer disco lo sacó en 1995 con el nombre de ‘Le quattro stagioni’ y el último -el número 28- en 2021 con el nombre de ‘Petit Garage’.

Además, ha ganado muchos premios internacionales entre los que destacan los concursos internacionales Felix Mendelssohn (Berlín, 1987) y Pablo Sarasate (Pamplona, 1995) además de los premios recibidos en concursos como Niccolo Paganini (Génova) o Zino Francescatti (Marsella), entre otros. Como dato curioso, Ara Malikian también ha participado en bandas sonoras de cine y entre otros ha trabajado con Pedro Almodovar en ‘La mala educación’ (2005) y ‘Hable con ella’ (2002) o con Emilio Aragón en ‘Pájaros de papel’ (2010).

“Ara Malikian es un showman. Recuerdo que la orquesta empezaba tocando el Requiem de Mozart y él seguía tocando rock duro”

“Durante el concierto cuenta su vida, que fue dura, pero contada de

una manera muy especial en la que acabas riendo”