'Celullar', la nueva colección de Isabel Zapardiez, habla del cambio que estamos viviendo en estos momentos, y también de los nuevos pasos que ha dado esta diseñadora en su firma en vista de los nuevos retos a los que se enfrenta la industria de la moda. El germen que dio lugar a sus últimos diseños, que recientemente han sido presentados en el Museo San Telmo de Donosti, su ciudad natal, tuvo lugar antes de la pandemia. Toda una visionaria, ya que tomando como inspiración el origen de la vida, su mensaje ha ido adquiriendo nuevas capas de significado a raíz de los acontecimientos que nos han atravesado por dentro por culpa de la COVID.
“’Celullar’ refleja, a su vez, la revolución que estamos viviendo en nuestros hábitos, de la evolución de las empresas para adaptarse y de la transformación que se está produciendo en sectores como la moda”, explica la modista gipuzkoana, haciendo referencia a su propia experiencia después de dar el salto a la venta digital con su línea de moda ‘ready to wear’.
De mente positiva frente a los cambios, Isabel Zapardiez ha alumbrado una colección muy enérgica y vital, donde la vanguardia que la define a nivel creativo, se refleja en la viveza de los colores y en la versatilidad de las líneas que vertebran todas sus prendas. Así, reinterpreta sudaderas, bombers, parkas y otras piezas populares del día a día, llevándoselas a su terreno, el de la alta costura, e integrándolas en looks sofisticados donde cobran especial protagonismo los tejidos elegidos, con los que consigue “sorprendentes juegos de texturas y efectos de movimiento”. Y una vez más, apuesta por los complementos, que se han convertido en un ‘leit motiv’ de su filosofía, en busca de hacer sus ‘looks’ más versátiles para cubrir todas las necesidades de la mujer actual. En esta ocasión, Isabel Zapardiez lo ha vuelto a hacer y convierte el calzado en la clave que encumbra todos sus estilismos.
Es por eso que su nueva colección abarca todo tipo de piezas “de diario” que Isabel Zapardiez reinterpreta. Bombers, sudaderas, camiseros, pantalones, faldas y camisetas, se combinan de forma ecléctica con zapatos con detalles que aportan un tono informal.
Experimentación constante
El discurso de ‘Celullar’ se articula en consonacia con la esencia de la diseñadora gipuzkoana, a través de una amplia gama de propuestas, formas y tejidos, pero sin perder en ningún momento su hilo conductor. Es una colección extensa, donde se presentan todas las líneas en las que trabaja actualmente: moda nupcial y de fiesta y ceremonia, tanto en formato de alta costura y ‘ready to wear’. De esta forma, expresa el momento de “revolución creativa” que atraviesa la diseñadora, ilusionada en su deseo de seguir experimentando en el frenético mundo de la moda, donde ella se mueve de forma ágil pero en equilibrio, conservando intacto su gusto por la ‘slow couture’ y las prendas bien hechas.
Las siluetas de la colección son muy dinámicas. Destacan los volúmenes superiores, -en mangas y cinturas-, y las grandes faldas, en contraste con la ligereza y el movimiento lineal presente en vestidos y pantalones”, detalla. La fusión también predomina en en la selección de tejidos, que abarcan un amplio espectro. Se pueden ver satenes de seda natural, gasas, brocados y otros hilos tradicionales, pero también materiales sacados de su contexto, como el plástico de burbujas reciclado. En cuanto a colores, los tonos fucsias, amarillos y esmeraldas, junto a. los colores vibrantes del ágata y sus formas sinuosas protagonizan sus propuestas para vestirse de fiesta.
Y como colofón, la nueva temporada de su moda nupcial de alta costura se dibuja con líneas sofisticadas y discurre entre sedas y bordados, con contrastes de líneas y volúmenes. Desde un vestido sirena con mangas mariposa, pasando por voluminosas faldas a capas, hasta vestidos de líneas arquitectónicas que harán las delicias de novias futuras.