uena a utópico pero, ¿podemos aprender a escuchar todo lo que nos rodea? ¿Podemos llegar a tener la capacidad de interpretar a la naturaleza? ¿Llegar a ser uno que ella? Sí, es posible. En la Granja Escuela de Ultzama se imparte un curso de conexión ambiental de la mano del experto rastreador Fernando Gómez, "que ha entrenado y trabajado con los Rangers apache de Nuevo México", indica el cofundador de la Granja Escuela Óscar Labat. "Busca reconectar con la naturaleza y lo enseña. Ha hecho una infinidad de cursos en todo el mundo, para bomberos, los Geos, etc. Enseña mirada periférica, memoria visual, escuchar y sentir la naturaleza, etc. Tiene la sensación que la gente vive muy rápido y que no desconectamos nunca", añade.

El propio Fernando Gómez, nacido en 1982 en Segovia, se define como "una persona dinámica, con muchas inquietudes, que disfruta aprendiendo y enseñando a los demás. Polivalente en diferentes campos y con gran capacidad de adaptación y aprendizaje. Exigente, ordenado y meticuloso tanto en vida profesional como personal".

En su trayectoria personal añade que ha pasado de formar "parte de unidades de élite de bomberos forestales y el ejército, a tener mi propia marca con la que trabajo dando servicios de rastreo profesional a todos los niveles -como es el caso del curso de conexión ambiental en la Granja Escuela de Ultzama-, desde educación ambiental a los más pequeños pasando por enseñar a buscar personas desaparecidas o entrenar unidades de las fuerzas especiales. Mi vocación formativa siempre me lleva a trasmitir al resto de personas lo aprendido tanto a través de conferencias y cursos como mediante la publicaciones. Actualmente soy Rastreador Profesional a nivel internacional".

totalmente práctico

Es un curso práctico, donde se muestran las diferentes técnicas usadas desde tiempos ancestrales por el pueblo nativo-americano apache para obtener un vínculo estrecho con la naturaleza. Se muestra una filosofía de vida, una manera diferente de ver, sentir y conectar con uno mismo y el bosque a través de las huellas, rastros y señales que deja la fauna salvaje. Además, durante el curso se realizan ejercicios y pruebas con los cinco sentidos. Desde las técnicas de movimiento corporal pasando por el análisis espacial del entorno a la lectura de huellas e interpretación de sonidos. Recorridos, paradas y estaciones donde se trabaja el cuerpo, la mente y el espíritu para conectar con el ritmo del Bosque de Orgi y, al mismo tiempo, poder llegar a entender qué ocurre en cada estación del año.

"Este tipo de cursos están en la línea de lo que buscamos, que es dar a conocer usos y costumbres del mundo rural", concluye la navarra Beatriz Ochotorena. Por último, cabe resaltar que es un curso enfocado a todos los adultos y que, además, sean unos grandes amantes de la naturaleza. Aunque, tal y como indican ambos, también está dirigido a cualquier persona que quiera sentir, experimentar o conocer en primera persona y sin filtros otras dimensiones paralelas a lo que es la vida en la gran ciudad.

"Lo imparte Fernando Gómez, rastreador profesional que ha entrenado y trabajado con los Rangers apache de Nuevo México"