La mayoría de los bancos han subido las comisiones por sus diferentes servicios y las mantendrán durante este 2022 en un escenario de alta inflación y sin importantes subidas de tipos de interés en el horizonte.

Algunos bancos te pueden cobrar hasta 240 euros al año por el mantenimiento de la cuenta, especialmente los menos vinculados (quienes tengan menos productos contratados con la entidad) y los que no cumplan los requisitos de la entidad financiera. No obstante la media suele estar entre 26 y 45. Es decir, para pagar dejar de pagar comisiones y gastos de mantenimiento debes contratar productos adicionales como seguros, valores, fondos de inversión, tarjetas, domiciliaciones, etc.

Contratar una cuenta sin comisiones es posible, aunque con ciertos límites en sus prestaciones y operativa.

Una cuenta gratuita no significa que sea peor que una cuenta con comisiones. En general estos productos están preparados para que puedas llevar a cabo toda la operativa del día a día y podrás ingresar dinero, hacer transferencias, sacar dinero en cajeros, pagar compras con tarjeta, pagar con el móvil, domiciliar recibos o enviar dinero por Bizum si el banco está adherido a este servicio.

Antes de contratar una cuenta sin comisiones deberías hacerte varias preguntas: ¿recibo cada mes una nómina u otro ingreso? ¿quiero tener acceso a miles de cajeros gratis o apenas uso el dinero en efectivo? ¿opero principalmente a través de mi smartphone? ¿necesito la cuenta para el día a día o la quiero para viajar?

En función de cuál sea tu situación y de tus necesidades, podrás escoger una cuenta u otra. HelpMyCash recomienda valorar estos aspectos antes de contratarla:

Comisiones. Si buscas es una cuenta sin comisiones, lo primero que debes comprobar antes de abrirla es que realmente sea gratis. Léete el contrato y fíjate especialmente en los gastos de mantenimiento y administración, y en el coste de las transferencias y de las tarjetas.

Requisitos. Hay cuentas sin comisiones y sin condiciones y otras que obligan al titular a cumplir una serie de requisitos para no pagar. Sea cual sea la que escojas, asegúrate de que puedes cumplir los requisitos. No es recomendable contratar otros productos con coste, a menos que realmente interesen, para cumplir con las exigencias del banco y no pagar comisiones. La mayoría de los bancos ofrece cuentas sin gastos con vinculación, pero cada vez hay más que comercializan cuentas sin comisiones y sin vinculación obligatoria.

Tarjetas. Asegúrate de que la cuenta viene acompañada de al menos una tarjeta sin cuotas de emisión ni de mantenimiento para sacar dinero y pagar tus compras.

Cajeros. Antes de abrir una cuenta sin comisiones, debes verificar de qué cajeros podrás sacar dinero gratis para saber si la cuenta te resulta útil.

Regalos y otras ventajas. Algunas cuentas sin comisiones, además de darte la posibilidad de realizar las operaciones básicas sin coste (transferencias, reintegros, ingresos, etc.), incluyen ventajas adicionales como rentabilidad, descuentos en compras, regalos, etc. Eso sí, algunas de estas ventajas solo están disponibles para clientes que domicilien una nómina u otro tipo de ingreso recurrente.

Operativa on line. Comprueba si la cuenta te permite operar tanto por ordenador como por el móvil o únicamente a través de una aplicación. Algunos bancos solo disponen de plataforma móvil y no permiten realizar operaciones a través de un ordenador. La operativa es la misma, pero tendrás que acostumbrarte a usar tu móvil.

Bizum y pago móvil. Si envías dinero por Bizum regularmente y pagas con el móvil, asegúrate de que el banco te ofrece estos servicios y de que colabora con las plataformas que te gusta usar (Apple Pay, Google Pay, Samsung Pay...).

Y ya sabes, lo importante es tener claro qué requisitos te pide el banco, habitualmente domiciliar nómina, domiciliar recibos, realizar pagos con tu tarjeta y contratar productos adicionales como seguros, préstamos o fondos de inversión. Además, debes negociar con tu banco las condiciones e insistir en tus peticiones. Y por último siempre puedes cambiar de cuenta o de banco, ya que la mayoría de ellos (incluso los más reputados y con muchos años asentados en nuestro país) puede ofertarte una cuenta con comisiones cero.