La dirección de ArcelorMittal propuso ayer a la comisión negociadora del octavo acuerdo marco una subida salarial fija del 10% repartida en cinco años y desvincular ese incremento del IPC, según apuntaron fuentes sindicales presentes en la reunión celebrada en Etxebarri. En opinión de la dirección, según las mismas fuentes, la subida salarial debe desvincularse de la inflación por la volatilidad del mercado.

Ese 10% se repartiría de la manera que acuerde la mesa de negociación durante la vigencia del acuerdo marco. El sindicato mayoritario en la siderúrgica, UGT FICA, defendió como una “condición indispensable” que los salarios vayan referenciados al IPC para el mantenimiento de su competitividad. CCOO consideró que la empresa “mantiene el discurso trasnochado de que si no hay moderación salarial se pondría en jaque la competitividad”. Según este sindicato, la empresa ha propuesto una subida fija “muy por debajo” de las pretensiones sindicales” con el argumento de la necesidad de avanzar en la productividad, flexibilidad y polivalencias. CCOO insistió en que los “abultados e indecentes” beneficios obtenidos durante el pasado años y lo que va del presente ejercicio deben verse reflejados en mejoras salariales y laborales para el conjunto de trabajadores del grupo.

Por otra parte, la empresa propuso negociar cómo se va a dar salida al personal nacido en los años 1962, 1963 y 1964, “pero dentro de la mesa de descarbonización y del plan social”, precisaron. Según los sindicatos, la dirección hizo un análisis de la situación actual del mercado y apuntó que se está notando una bajada en los precios por la entrada de importaciones de países extracomunitarios.