- La consejera vasca de Desarrollo Económico, Arantxa Tapia, afirmó ayer que el Gobierno Vasco está dispuesto a poner en marcha más ayudas si el desarrollo de la guerra de Ucrania lo exige, después de las medidas de respuesta ante las consecuencias del conflicto bélico acordadas este viernes en Euskadi de 200 millones de euros.

En una entrevista a Radio Euskadi, Tapia recordó que el Ejecutivo vasco y las diputaciones aprobaron ya hace semanas activar 530 millones “para transformar y desarrollar la economía”, así como un paquete de medidas fiscales, y defendió que las nuevas medidas “pretenden reactivar la economía, transformarla y hacer frente a la situación que se vive”.

Asimismo, subrayó que se trata de medidas “complementarias a las establecidas por el Estado”, y su duración en aplicación y “necesidades adicionales dependerán de la duración de la guerra”. “Tenemos capacidad para ampliar esos recursos, pero en estos momentos creemos que nos permiten hacer frente a la situación”, añadió. Respecto al denominado fondo de rescate económico, dotado con 143 millones para empresas, la consejera sostuvo que el Gobierno Vasco se reunido “con los sectores afectados y con los cluster”, de tal forma que “todas las aportaciones” recibidas se han plasmado en el plan. “Si se estima oportuno, no obstante, poner en marcha dotaciones adicionales estamos dispuestos a analizarlo”, insistió, aunque no cree que “se vaya a quedar nadie fuera de las ayudas”.

Respecto a la llegada de los Fondos Next, Arantxa Tapia recordó que desde Euskadi se enviaron al Gobierno central tres proyectos “bien trabajados” y la única respuesta que se ha recibido es que “podrían ser susceptibles de recibir financiación”. No obstante, advirtió que estos tres no son los únicos proyectos presentados, indicó que “Euskadi y sus empresas están muy acostumbrados a acudir a convocatorias de este tipo”.

Por otro lado, sostuvo que la guerra en Ucrania ha revelado la dependencia energética de Europa respecto de terceros y, por ello, apostó por “intentar acelerar la transición energética y la lucha contra el cambio climático”.

Tras reconocer que el autoabastecimiento energético en Euskadi “es muy escaso”, incidió en que su “dependencia es casi del 90%”, un porcentaje que es necesario “mejorar”. Así, apostó por un acuerdo energético de país, por parte de todas las fuerzas políticas vascas, algo que ha considerado “posible”. “Hay que ser más eficientes, consumiendo menos. Hay que ampliar la generación de energía renovable con parques eólicos y fotovoltaicos y el autoconsumo.