- Un juzgado ha reconocido el derecho de una investigadora de una empresa asturiana a desarrollar el 90% de su jornada laboral en la modalidad de teletrabajo, que desarrollará en el domicilio familiar en A Coruña, y realizar el 10% restante de forma presencial en Avilés para facilitar la conciliación de la vida laboral y familiar tras haber tenido una hija.

La demandante trabaja como investigadora en una empresa radicada en Avilés y el 15 de marzo de 2020, coincidiendo con el inicio del confinamiento por la pandemia, la compañía la llamó a teletrabajar, por lo que se trasladó a la ciudad gallega, donde vive y trabaja su marido. La mujer tuvo una hija en marzo de 2021, pero la empresa le comunicó que se debía incorporar a la actividad laboral de forma presencial a partir de octubre. Ella explicó su nueva situación y pidió seguir teletrabajando, una opción que la compañía descartó alegando razones organizativas.