- España rechazó ayer la nueva oferta presentada para la pesca de la merluza en aguas ibéricas del Atlántico en 2022, que reduciría del 18,5% al 12% el recorte en las capturas de esa especie. La primera propuesta de compromiso presentada durante la reunión mantenida la mañana de ayer por Eslovenia, país que ejerce la presidencia de turno de la UE hasta finales de mes, tiene en cuenta las peticiones realizadas por los ministros de los Estados miembro en la primera jornada del Consejo de Agricultura y Pesca, celebrada el pasado domingo.

Sin embargo, para España, esa primera propuesta de compromiso “todavía no es satisfactoria”, aseguraron fuentes del Ministerio de Agricultura y Pesca. Reconocieron, asimismo, “avances” que tienen “señales positivas” en el caso de la cigala y el lenguado, “pero no tanto en el caso de la merluza sur”.

“Aunque ha habido una propuesta de avance, todavía no es suficiente para cubrir con aquellas necesidades que nosotros consideramos fundamentales”, comentaron, y confiaron en seguir negociando para obtener “mejores resultados” en la merluza que se captura en el Cantábrico y las aguas del Atlántico desde Finisterre hasta Tarifa.

La consejera de Mar de la Xunta de Galicia, Rosa Quintana, también consideró insuficiente la reducción del 12%. “En esta última propuesta que nos han pasado por la mañana, notamos una ligera mejoría. Había una propuesta de reducción del 18% en la captura de la merluza del sur (...) y ahora hay una propuesta de una reducción de un 12%. Entendemos que es un paso adelante, pero que todavía no es satisfactorio”, declaró. La consejera se encuentra en Bruselas para seguir las negociaciones pesqueras.

Desde el Ministerio de Agricultura, además, consideraron que la reducción no se puede justificar por la falta de un modelo científico que explique la situación de la especie. “Hemos explicado a la Comisión que la situación biológica del stock es una situación buena”, señalaron las fuentes. España también busca “mejorar los planteamientos en relación con los abadejos”.

Como noticia positiva, el Estado ha conseguido que en el jurel que se pesca entre Finisterre y Tarifa las capturas vayan a crecer en 2022 un 12%, frente al recorte inicialmente propuesto del 16%.

En el Mediterráneo hay más preocupación, ya que no ha habido todavía una propuesta que se acerque a ninguno de los puntos que España considera que deben modificarse para tener una propuesta equilibrada, indicaron las fuentes, que apuntaron a la necesidad de “seguir trabajando”.

Con la reducción de esfuerzos que propone Bruselas, el sector pescaría dos meses menos al año que cuando empezó a aplicarse el plan plurianual. El Estado ha mantenido encuentros bilaterales sobre el Mediterráneo con Francia e Italia y, aunque hay “puntos en común”, no hay “unanimidad por parte de los tres países”. En cuanto al Atlántico, España, Francia y Portugal van “de la mano” en lo referente al lenguado, abadejo, jurel y merluza sur. Los ministros de Pesca continúan las negociaciones para tratar de cerrar un acuerdo antes de mañana, cuando se celebrará en Bruselas una cumbre de la Asociación Oriental en la que participarán los líderes de la UE. A su llegada al encuentro el domingo, el ministro español, Luis Planas, ya declaró que las prioridades de España serían las cuotas de la merluza sur y la defensa de los intereses de los buques españoles en el Mediterráneo. Para España, “primera flota pesquera de la UE, con aproximadamente 9.000 buques”, esta negociación es “clave” porque afecta “prácticamente a la totalidad de la flota”, señaló Planas.