- El coste por hora trabajada disminuyó en el segundo trimestre un 3,8 % interanual, la mayor caída en cuatro años, debido al aumento de las horas trabajadas derivado de la menor incidencia de los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) en todas las actividades económicas respecto a un año antes.

Según la estadística publicada ayer por el INE, en el aumento de las horas trabajadas ha influido también la reducción de las bajas por incapacidad temporal en relación con el segundo trimestre de 2020, en el que la incidencia de la covid-19 estaba en máximos.

Los trabajadores en ERTE del segundo trimestre de 2021 representaban la octava parte del récord registrado en el segundo trimestre de 2020 en pleno confinamiento, ya que a cierre de junio quedaban algo menos de 450.000 personas respecto al pico de casi 3,6 millones de abril de 2020.

Al disminuir los trabajadores en ERTE, las empresas han pagado más salarios y también más cotizaciones a la Seguridad Social como consecuencia de las menores exoneraciones en las cuotas.

Sin embargo, las horas efectivamente trabajadas han aumentado más que los costes en todas las actividades económicas que estaban más afectadas, por lo que de media el coste por hora trabajada ha disminuido. La caída interanual del 3,8% supone el mayor descenso desde el primer trimestre de 2017, y rompe con la racha alcista iniciada en el tercer trimestre de 2018.