“La situación actual con la escalada de precios de las materias primas (dada su escasez), la dificultad de movilidad y el ritmo de la vacunación aumenta la incertidumbre económica que existe para los años 2021 y 2022”. Es la principal conclusión que SEA Empresas Alavesas extrae de su informe de abril del Observatorio de Afectación de la covid-19.

Y es que si a comienzos de año el sector empresarial alavés detectaba un agravamiento de la incertidumbre sobre el escenario económico derivada de la pandemia, en este inicio del segundo trimestre esa incertidumbre parece cronificarse -la entrega de marzo ya advertía de que la lentitud en la campaña de vacunación sembraba más dudas en la recuperación empresarial, a lo que hay que añadir el empeoramiento epidemiológico del último mes-, añadiendo nuevos elementos. La mitad (52%)de las empresas encuestadas afirma que la pandemia les está afectando mucho, 15 puntos más que en el anterior informe.

La entrega de abril de este observatorio, que recoge datos de una encuesta realizada entre 164 empresas del territorio, detecta un nuevo factor de preocupación: el 29% de las empresas afirma estar sufriendo la falta de materias primas, once puntos más que en el informe anterior. “La escasez de estos suministros se traduce en un doble escollo: las mercancías que llegan hasta nuestros polígonos cada vez lo hacen en un número menor y, además, nuestras empresas se ven obligadas a hacer frente a un mayor precio por las mismas”, explica SEA.

Hay que destacar que esta encuesta se realizó entre el 29 de marzo y el 8 de abril y que precisamente a finales de marzo el comercio mundial sufrió el bloqueo del Canal de Suez al quedar varado el Ever Given. Una circunstancia que ha podido incidir de manera más o menos puntual en ese problema de la falta de materias, que no obstante también venía notándose con anterioridad en dificultades de suministro desde Asia, como en el caso de los semiconductores que ya obligó recientemente a parar la producción en la factoría alavesa de Mercedes Benz.

“Esta situación, unida a las restricciones ligadas a la movilidad, ha experimentado un notable aumento en las últimas semanas, hasta el punto de que, a día de hoy, la mitad de las empresas confiesa tener dificultades para dar servicio o recibir a sus clientes”, añade la patronal alavesa al detectar que un 49% de las empresas del territorio afirma estar teniendo problemas con la movilidad para dar servicio o recibir clientes, once puntos más que en el informe de marzo.

Estos dos elementos inciden en que el 90% de las empresas del territorio presenta una caída de actividad por falta de pedidos -11 puntos más- y que el nivel de la cartera de pedidos empeora, con el 78% de las firmas encuestadas -seis puntos más que la anterior entrega- declarando que esta es débil (58%) o muy débil (20%). Prácticamente dos de cada diez firmas (19%) afirma que su facturación ha caído más del 50% en términos interanuales.

Así las cosas, nueve de cada diez empresas encuestadas no espera recuperar la actividad de su empresa al menos has

ta dentro de un año y, de hecho, el 54% cree que tardará más de un año.

En el ámbito laboral, esto supone que un 12% de las compañías del territorio prevé recortar su plantilla de aquí a final de año, seis puntos más que en el anterior informe, aunque el 84% afirma que la mantendrá. Entre las que prevén disminuir la plantilla, siete de cada diez espera que esa reducción sea menor al 10% y tres de cada diez, de entre el 20 y el 30%. En cualquier caso, el 98% asegura que no se ha planteado presentar concurso de acreedores.