Tubacex aplicará el ERE en las plantas alavesas de Llodio y Amurrio que contempla, a fecha de este miércoles, 124 despidos, además de un ERTE para toda la plantilla, tras concluir sin éxito el período de consultas y los plazos legales de negociación entre dirección y comité para intentar llegar a un acuerdo.

Fuentes sindicales han confirmado que la empresa no ha retirado el ERE como reclamaban los representantes de los trabajadores, por lo que la dirección tiene de plazo 15 días para notificar el expediente a la autoridad laboral y el listado de personas afectadas por los despidos.

De esta forma concluye el período de un mes de negociación desde que la dirección anunciara un ERE y un ERTE para los alrededor de 800 trabajadores.

Durante este tiempo se han producido varias reuniones pero no se han aproximado posturas. La empresa considera que las plantas tienen problemas estructurales por la crisis del principal sector al que van destinados sus productos: petróleo y gas, lo que ha provocado una caída de la cartera de pedidos.

Por su parte, el comité, aunque reconoce que hay problemas económicos, considera que estos son coyunturales, por lo que defienden medidas temporales en lugar de despidos.

Inicialmente la dirección planteó un ERE con 150 despidos y luego redujo esta cifra a 136. Doce trabajadores han comunicado a jubilaciones anticipadas por lo que los afectados son 124.

Esta cifra de despidos se podría reducir aún más con los trabajadores que firmen bajas voluntarias. Hasta ahora, según LAB, 12 empleados han pedido acogerse a esta opción, aunque la dirección ha rechazado 2 de estas solicitudes. El plazo para que los interesados formalicen esta oferta concluye el próximo lunes.

Para estas bajas incentivadas la dirección contempla indemnizaciones de 45 días por año trabajado con un máximo de 24 meses a los empleados con una antigüedad anterior al año 2012 y de 33 días a los que están empleados desde esa fecha, también con un tope de 24 meses, ha explicado el representante de LAB en el comité, Jonatan García.

En cuanto al ERTE para la totalidad de la plantilla, la decisión de la empresa es aplicarlo desde este mismo mes de marzo y hasta septiembre, lo que supondrá que los empleados trabajarán un 40 % de su jornada y el 60 % restante estarán en el paro.

La última reunión se ha celebrado en un céntrico hotel de Bilbao, en lugar de en la planta de Llodio como estaba previsto. Los trabajadores, que llevan en huelga indefinida desde el 15 de febrero, han vuelto a protagonizar una sentada a las puertas de la fábrica para impedir la entrada de los autobuses en los que viajan los directivos, que no han llegado a traspasar esta barrera.

La dirección ha cambiado el lugar de la cita al hotel bilbaíno, donde se han concentrado en el exterior decenas de trabajadores mientras varios efectivos de la Ertzaintza custodiaban el acceso.

El comité ha denunciado que al entrar al establecimiento han sido tratados "como auténticos delincuentes" ya que se les ha cacheado y revisado las mochilas "todo ello con la complicidad de la dirección".

Los sindicatos han remarcado que la "pelea" no acaba aquí y que seguirán con la lucha para que se retire el ERE y han agradecido a toda la plantilla su apoyo.

Según LAB, los servicios jurídicos de los sindicatos están preparado las demandas correspondientes para conseguir la retirada del ERE o que se declare nulo, aunque de momento se desconoce cuándo las interpondrán en los juzgados.