- La OCDE ha mejorado las previsiones que hizo en diciembre sobre la economía española para este año y el próximo porque ve que se están levantando muchas restricciones a los movimientos, pero insiste en que hay que acelerar la vacunación, vista como la única forma de reactivar sectores como el turismo.

En su informe intermedio de perspectivas publicado ayer, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) calcula que España crecerá este año un 5,7%, lo que significa siete décimas más de lo que anticipaba hace tres meses. La recuperación debe continuar en 2022, con una progresión del 4,8%, que supone ocho décimas más que las estimadas en diciembre.

Esa revisión al alza es una más de las importantes de los países del G20, en los que España está incluido como invitado permanente. Una de las razones dadas por la economista jefe de la OCDE, Laurence Boone, es que “ha habido menos restricciones a la movilidad y ha lidiado mejor con la situación sanitaria”. Hay que tener en cuenta que en 2020 España sufrió el mayor batacazo de la lista del G20, con una caída del 11%.

Si se cumplen las expectativas de la OCDE, el año próximo solo habría tres países en el G20 que tendrían una progresión del producto interior bruto (PIB) mayor que la de España: India (5,4%), Indonesia (5,4%) y China (4,9%).

La previsión de un crecimiento del 5,7% para España este año se queda, en cualquier caso, muy por debajo del 7,2% que había utilizado en octubre para elaborar su presupuesto el Gobierno, que incluso había barajado un 9,8% en caso de ejecución plena de los fondos de la Unión Europea.

En la presentación del estudio, Boone hizo hincapié en que la gran prioridad para todos ahora es acelerar la vacunación. Y en que esto es particularmente cierto para España porque es la condición para la reapertura del turismo, que tiene un peso muy grande en la economía del país.

España es uno de los Estados más avanzados en la administración de dosis de vacunas en la Unión Europea, pero está limitado como los otros miembros por el suministro de las farmacéuticas a partir de sus contratos.

La economista jefe no se privó de comparar el nivel de vacunación en la UE, donde incluso España está lejos aún de haber administrado alguna dosis al 10% de la población, con el de Israel, donde ya se ha inyectado a más del 90%, con el del Reino Unido, que va por más del 30%, o con el de Estados Unidos, que ha superado el 20%.

Otra diferencia significativa entre la Unión Europea y Estados Unidos, que es quien sale mejor parado en este informe, son los paquetes de estímulo masivos que han aprobado sucesivamente las administraciones de Donald Trump y Joe Biden, y que ya están teniendo un efecto positivo sobre el crecimiento.

La OCDE considera que el plan europeo de rescate de 750.000 millones de euros, aunque es muy inferior a los casi 3 billones de dólares de los dos paquetes de Estados Unidos, tiene una dimensión adecuada.

Sin embargo, insiste en que el plan europeo, en el que España debe ser el segundo mayor beneficiario en términos absolutos, solo por detrás de Italia, ahora se debe implementar de forma rápida y efectiva para que se traslade al consumo y al empleo y tenga una repercusión real.

Esta es la primera vez que la OCDE ofrece previsiones sobre España en uno de sus informes adelantados, que se limitan a los países del G20. La explicación oficial es que lleva muchos años en este grupo de los grandes países, aunque sea con el título de “invitado permanente”.

“La revisión de

la OCDE sitúa a España a la cabeza del crecimiento en la Unión Europea”

Vicepresidenta del Gobierno español