La ministra española de Industria, Reyes Maroto, cree que la inversión para el proyecto estratégico de movilidad eléctrica que supone la construcción de la primera fábrica de baterías para vehículos eléctricos en el Estado español rondará los 5.000 millones de euros.

La propia ministra anunció esta semana la creación de un consorcio público-privado con Seat-Volkswagen e Iberdrola para construir una fábrica de baterías para vehículos eléctricos, la primera de España, “cerca” de la planta que la compañía automovilística tiene en Martorell (Barcelona).

En una entrevista, Maroto dice que, aparte del plan Moves, en los fondos europeos hay más de 1.100 millones de euros para movilidad y en Industria cuentan con financiación para baterías y fabricación de vehículos, dentro del cambio del proceso productivo, aunque también asegura que, en principio, habrá más aportación privada que pública.

La ministra señala que el consorcio público-privado al que se han sumado Seat e Iberdrola, así como Caixabank y Telefónica, “está abierto a más socios”, a toda la industria automovilística española.

Explica que el horizonte de la fabricación de vehículos eléctricos es el de los años 2024-25, para cuando esperan tener todo el proyecto desarrollado, lo que permitiría producirlos no solo en la planta Martorell sino en otras fábricas de España.

En este sentido, Maroto apunta que cuando se habla de que la fábrica de baterías estará cerca de Martorell, quiere decir que no van a traer las baterías de China. “Cerca significa España”, recalca y reconoce que decidirán su ubicación entre todos los socios una vez se conforme el consorcio.

“Lo importante es que esté en España”, insiste, ya que la ambición de liderar el vehículo eléctrico pasa necesariamente por tener toda la cadena de valor de producción en nuestro país.

En la entrevista, Reyes Maroto afirma que para el gobierno catalán “la política industrial no ha sido una prioridad” y que algunos cierres en Catalunya se producen por la “falta de liderazgo por parte de la Generalitat”, lo que ha sido “suplido con una política nacional que ha invertido mucho en Cataluña en los últimos dos años”.

Preguntada sobre las perspectivas turísticas para el próximo verano, Maroto respondió que se está trabajando en la reapertura, sobre todo con el certificado digital, que permitirá la movilidad segura de personas vacunadas, las que ya han pasado la covid y quienes puedan acreditar una PCR negativa.