- La adquisición de todos los activos ferroviarios de Bombardier por parte de Alstom en todo el mundo por 5.500 millones de euros, operación que ha culminado este viernes 29 de enero, supondrá la creación de un gigante del sector en el Estado que contará con más de 3.000 trabajadores. La fábrica de Trapagaran será una pieza clave del nuevo proyecto. En la planta trabajan en torno a 200 personas en la fabricación de sistemas de propulsión para trenes.

En todo el mundo, el grupo combinado tendrá una facturación anual de unos 15.700 millones de euros y contará con una cartera de pedidos pendientes superior a los 71.100 millones. La plantilla de la empresa resultante superará las 75.000 personas, presentes en más de 70 países.

Desde ayer, una vez formalizada la adquisición, todos los centros de Bombardier Transportation han pasado a formar parte de la multinacional francesa, lo que incluye también su denominación, pasando a llamarse ahora Alstom, según informan a Europa Press en fuentes de la compañía.

Durante las próximas semanas, la dirección mundial de Alstom comunicará la nueva organización directiva en todos los países en los que ha adquirido activos de Bombardier, aunque cuando anunció la adquisición ya defendió que no habría recortes de empleo.

En este sentido, Bombardier Transportation nombró esta semana en España un nuevo presidente y consejero delegado, David Torres, antes de formalizarse la adquisición, alegando que coordinará la integración de todos los negocios de la compañía presentes en el país.

En mayo del año pasado, Alstom España nombró a Leopoldo Maestu nuevo presidente de la compañía, por lo que, a partir de ahora, Maestu dirige tanto las operaciones de la francesa como de la canadiense.