- Los movimientos de pensionistas de la Comunidad Autónoma Vasca y Nafarroa se manifestarán el próximo 13 de febrero en las cuatro capitales vascas de Hego Euskal Herria para exigir que se recojan sus reivindicaciones en la reforma del Pacto de Toledo, entre ellas una pensión mínima de 1.080 euros al mes y la eliminación del factor de sostenibilidad.

Así lo acordaron ayer representantes de las coordinadoras de pensionistas de Araba, Bizkaia, Gipuzkoa y Nafarroa tras reunirse de forma telemática para estudiar próximas movilizaciones y acciones reivindicativas para las próximas semanas.

Juan Antonio Armentia, uno de los portavoces de la coordinadora alavesa, señaló que la principal decisión adoptada es la convocatoria de manifestaciones el 13 de febrero, así como continuar con las movilizaciones que organizan todos los lunes.

Además los pensionistas vascos tienen previsto entregar en la Cámara de Gasteiz un documento con sus reivindicaciones con la intención de que se incluyan en los presupuestos de Euskadi para 2021, cuyo proyecto de ley se está tramitando actualmente en el Parlamento Vasco.

También han decidido remitir una carta al presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, para expresar su protesta por la falta de medidas concretas que mejoren las prestaciones del colectivo de pensionistas, “en contradicción con el programa del PSOE”.

Dirigirán otras misivas a los partidos políticos que han recogido las exigencias de los pensionistas en la negociación del Pacto de Toledo y que no se han incorporado al texto con el fin de que defiendan los intereses del colectivo a través de iniciativas parlamentarias y pedirán a los sindicatos su apoyo.