- El sector industrial vasco ligado a la automoción, la industria más importante de Euskal Herria, afronta con preocupación 2021 debido a la importante caída de ventas de coches, un 32% en el Estado en 2020 y un 25% en Europa, y la subida del precio de los automóviles en el mercado interno, en torno a un 5%, este año por el efecto impositivo de las nuevas normas de emisiones WLTP.

En un mercado a la baja por la combinación de la crisis económica derivada de los efectos de la pandemia, las incertidumbres sobre el futuro del automóvil, -forzado a una transición hacia vehículos sin emisiones que, caso de los eléctricos, no cuentan todavía con el respaldo de los consumidores que los ven caros y poco prestacionales por sus limitaciones de autonomía y recarga-, una subida de precios del orden del 5% de media por efectos fiscales de la nueva normativa de emisiones, no ayuda en nada a un sector clave en la economía de Euskadi.

No hay que olvidar que en el caso de la Comunidad Autónoma Vasca, la industria de automoción factura nada menos 20.375 millones de euros anuales, sin contar los datos de la empresa Mercedes Vitoria, y da empleo directo a unas 40.500 personas en los tres territorios históricos de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa.

Pues bien, en un mercado claramente a la baja, los usuarios se han encontrado con una subida media del precio de los coches del 5% en comparación a 2020 para los mismos modelos de vehículos. Esto se debe a la negativa del Gobierno español a modificar el Impuesto de Matriculación para adaptarlo a las nueva normativa de emisiones WLTP que da valores más altos para el mismo coche que la anterior NEDC.

Recordemos que en el Estado español existen cuatro tramos impositivos para el impuesto de matriculación. Y son los siguientes: Los coches cuyos motores emiten hasta 120 gramos de CO2 por kilómetro recorrido no pagan impuesto. Entre 120 y 160 gramos-km de CO2 se paga un 4,75%. Entre 160 y 200 gramos-km de CO2 se carga un impuesto de 9,75% y en el caso de los coches que emiten más de 200 gramos-km se abona el 14,75%. Con el WLTP al homologar los coches emisiones más elevadas que con el sistema anterior un gran número de modelos de coches saltan de tramo del impuesto, con el resultado de que desde el pasado 1 de enero los coches nuevos son más caros.

La Dirección General de Tráfico (DGT) ha calculado que con el nuevo sistema de medir las emisiones de CO2 las mismas son un 25% más elevadas que con la norma anterior.

¿Cuál es el resultado? Pues que "el 48% de todos los vehículos nuevos se verá afectado y cambiará de tramo. Estas subidas de precio de los automóviles se deberán exclusivamente al aumento impositivo", según Noemí Navas, de la asociación de fabricantes de coches ANFAC.

Obviamente, el problema de la subida de precios es un tema sólo del mercado local español, el problema es que el mercado interno del Estado español ha caído, y está cayendo, por encima de la media europea y en cifras preocupantes.

Las matriculaciones de automóviles en España al cierre del recién finalizado 2020 apenas superaron las 850.000 unidades, lo que se traduce en un desplome de más del 32% en comparación con los 1,25 millones de coches nuevos vendidos en 2019.

Además, España es uno de los tres grandes destinos turísticos de Europa y la evolución de la pandemia no augura una rápida recuperación del sector lo que también incide negativamente en las ventas de automóviles por la vía del canal de empresas de alquiler de vehículos que ha sido el que ha experimentado una mayor caída en las matriculaciones durante el año que acaba de concluir, con una bajada de casi el 60% y poco más de 96.000 unidades, mientras que las ventas a clientes particulares se redujeron por encima del 27%, hasta unas 427.000 unidades.

En todo caso, el sector automovilístico del Estado español, incluidos los grandes grupos vascos fabricantes de componentes, lamentan que el Gobierno no haya accedido a modificar el Impuesto de Matriculación para evitar esta subida de precios que, según Faconauto, la patronal de concesionarios, va a provocar que se dejen de vender más de 100.000 unidades en 2021.

Y si además las previsiones del mercado mundial son negativas se entiende la preocupación del sector vasco de cara a este ejercicio.

Ventas. Las matriculaciones de coches en el Estado español en 2020, unas 850.000 unidades, a falta de los datos definitivos en comparación con los 1,25 millones de unidades entregadas en 2019, suponen un descenso del 32%. La cifra está por encima de la media europea calculada en una reducción de las ventas en torno al 25%. Las ventas a clientes particulares, los que más acusan las subidas de precios y las incertidumbres sobre la tecnología del automóvil a futuro, se redujeron por encima del 27%, hasta unas 427.000 unidades. La crisis económica derivada de la pandemia del coronavirus también ha afectado al canal de empresas, que matriculó unas 328.000 unidades al término de 2020, un 24% menos que los datos del año anterior.

5%

subirán de media los precios de los coches este año en el mercado español por culpa del Impuesto de Matriculación ligado a las emisiones de CO2 ya que estas han crecido cerca de un 25% con el nuevo sistema de medición WLTP.