El comité de empresa de la planta de Aernnova en Berantevilla ha rechazado el ERE planteado por la dirección que afectaría a 101 de sus 454 trabajadores, y ha instado al lehendakari, Iñigo Urkullu, a "no ponerse de perfil" y a intervenir para evitar "más destrucción de empleo" en el sector aeronáutico.

La propuesta planteada por la dirección a los sindicatos concreta el despido del 22% de la plantilla y un ERTE que afectaría a 305 empleados en 2021, ambas medidas con efecto desde el 1 de febrero del año próximo.

En un comunicado, el comité cree que con estas medidas la empresa solo busca "asegurar los escandalosos beneficios del grupo (290 millones en los últimos 5 años) porque, a su juicio, la situación no es estructural, tal y como argumenta la empresa, sino coyuntural.

Los sindicatos aseguran que no es casualidad que el anuncio coincida con la aparición de vacunas contra la covid-19 porque "ponen una fecha mucho más cercana a la recuperación del sector", lo que dejaría a la dirección "sin argumentos para justificar sus mentiras".

"Tanto Aernnova como el Gobierno Vasco saben perfectamente que la situación es totalmente coyuntural y que en un plazo medio el mercado se va a recuperar totalmente con un fuerte crecimiento", afirman.

Por ello, el comité pide al lehendakari y a la consejera de Desarrollo Económico, Arantxa Tapia, que "no se pongan de perfil y dejen de justificar los despidos de estas grandes multinacionales".

"Les pedimos que de una vez por todas defiendan a un sector estratégico para el país como es el aeronáutico y que intervengan para evitar que se produzcan más destrucción de empleo en el sector", insisten.

El comité se ha mostrado dispuesto a analizar todas las medidas "coyunturales, no traumáticas y temporales" que se pongan encima de la mesa, pero sin aceptar los despidos.

En la misma línea, UGT ha hecho público un comunicado en el que también se opone al ERE por ser "una medida drástica e innecesaria", sobre todo porque la plantilla está inmersa ya en un ERTE, en un momento en el que una posible vacuna "y la consecuente vuelta a la normalidad en el sector hacía suponer que se abordaría 2021 con medidas de transición, menos lesivas y temporales".

"UGT no va a aceptar ningún despido ante una crisis tan real como coyuntural y tomará las medidas que sean necesarias, en defensa de los trabajadoras de la planta de Berantevilla", concluye la central.