- El presente ejercicio está marcado por la crisis económica generada por la caída de la demanda provocada por la pandemia y la mayoría de las empresas cotizadas en Bolsa están sufriendo un duro castigo. La excepción, en el caso vasco, son las compañías que apuestan por las energías renovables, cuya cotización se ha disparado al alza, caso de Iberdrola, Siemens Gamesa y Solarpack.

La apuesta verde de estas tres compañías está siendo recompensada de manera muy significativa como se ve por las cifras. Al cierre de 2019, Iberdrola valía en el mercado bursátil 58.403 millones de euros. Hoy se eleva a 72.485 millones, un significativo 24% de incremento en una empresa con importantes beneficios.

Solarpack, una compañía de Getxo dedicada a la energía solar fotovoltaica, ha pasado de una capitalización al inicio del presente año de 432 millones de euros hasta los 675 millones al cierre de la sesión del viernes pasado. Y al igual que la eléctrica, la sociedad también está obteniendo beneficios.

Más especial es la evolución de la tercera gran compañía cotizada con sede en Euskadi dedicada al negocio de las energías renovables, el fabricante de aerogeneradores, Siemens Gamesa. La sociedad de Zamudio inició el año con una valorización bursátil de 10.649 millones de euros y hoy cuesta 18.676 millones tras una revalorización del 75%. El problema es que la empresa, a diferencia de las dos anteriores, sus números rojos son los más altos desde la integración de la firma alemana y la vasca.

De la veintena de empresas con sede en Álava, Bizkaia, Gipuzkoa y Navarra que cotizan en Bolsa, la gran mayoría, 13, se ha devaluado sustancialmente este año. Solo las tres sociedades citadas, muy bien posicionadas en las energías verdes, se han revalorizado sustancialmente. Hay otras cuatro compañías al alza, pero salvo el caso de la navarra Viscofan, su situación es particularmente excepcional.

El operador telefónico guipuzcoano Más Móvil Ibercom ha pasado de valer 2.679 millones de euros al principio de 2020 a los 2.963 millones pero con una OPA por medio que, además la va a excluir de Bolsa. Similar situación es la de la bodega navarra Barón de Ley, con un repunte de 441 a 445 millones de euros y camino de salir de la cotización bursátil.

Y en cuanto a Tubos Reunidos, el fabricante siderúrgico alavés, su cotización es mínima porque está en pérdidas y en una complicada situación económica pero en los últimos días se ha revalorizado de 33 millones de euros al cierre de 2019 a 47 millones de euros el viernes. La séptima empresa vasca que se ha revalorizado este año es una compañía navarra, líder mundial en su segmento, Viscofan, que fabrica envolturas celulosicas-plásticas para el sector alimentario. Viscofan vale un 25% más que enero.

El resto de las cotizadas vascas evoluciona a la baja. Se trata de BBVA, CIE, Vidrala, Gestamp, Euskaltel, CAF, Faes, Neinor, Dominion, Iberpapel, Tubacex, Azkoyen y Vocento.

En todo caso hay notables diferencias entre ellas. Ningún analista se cuestiona la marcha de compañías como Faes Farma, Vidrala, Euskaltel o CAF. En cambio hay otras que por su presencia en sectores más incididos negativamente por el covid como la banca, la siderurgia, el automóvil, promoción inmobiliaria etc, les va a costar más recuperar la senda bursátil positiva.