La aerolínea irlandesa de bajo coste Ryanair registró unas pérdidas netas de 197 millones de euros en el último semestre fiscal, frente al beneficio neto de 1.150 millones de euros del mismo periodo del ejercicio anterior, después de mantener en tierra el 99 % de sus aviones durante cuatro meses por la covid. La compañía destacó que la crisis provocó una caída del 78 % de sus ingresos respecto a 2019, hasta alcanzar una facturación de 1.180 millones de euros. Las cuentas de la empresa reflejan las primeras pérdidas estivales de su historia.