- Mientras el comité de las plantas TTI y Aceralava, del grupo Tubacex en Llodio y Amurrio, daban el viernes por concluidas las negociaciones del nuevo ERTE, sin acuerdo con la dirección, LAB sacaba a la palestra la intención de Tubos Reunidos de presentar un nuevo Expediente de Regulación Temporal de Empleo de ocho meses de duración, que afectaría a 692 operarios con un impacto del 66% de la jornada.

Algo que han exigido se retire y que han tildado de “sinsentido” ya que, según se recoge en la memoria explicativa del expediente, la dirección tiene previsto presentar antes de finalizar el año un plan de viabilidad que “abarcaría hasta 2021” y, entre otras opciones, “contempla la posibilidad de reestructuraciones y nuevas medidas organizativas, además de la ejecución de un plan estratégico para 2022 y 2024”, matizaban desde el sindicato, que no puede “entender” la presentación de un ERTE “con una afectación tan alta y una duración tan elevada”, cuando se desconoce “por completo” cuál es el proyecto de futuro que se va a presentar a la plantilla.

Por lo que respecta a Tubacex -aunque los sindicatos están emplazados hoy a una quinta reunión de la mesa de negociación del nuevo ERTE, donde el área financiera del grupo explicará las cuentas de las plantas de Llodio y Amurrio- éstos ya dan por hecho que el 4 de noviembre comenzará a aplicarse el nuevo expediente (con una afectación del 80% de la jornada, frente al 60% del actual, y una duración de tres meses) y sin complementos, ya que la no aceptación de la línea roja marcada por los sindicatos (50% de regulación máxima y garantía de un año de empleo una vez finalice el ERTE, con posibilidad de ampliarlo a 6 meses) ha derivado en que den por concluidas las negociaciones. El comité sigue adelante con el nuevo paro de 24 horas y la concentración de las 13.30 horas en Orduña, anunciadas para mañana , aprovechando el paso de la Vuelta.

El Parlamento Vasco aprobó el jueves por unanimidad retomar la ponencia para la reactivación socioeconómica de esta comarca, que echó a andar la pasada legislatura, a iniciativa de EH Bildu, aunque el adelanto electoral dejó suspendidos los trabajos. La principal diferencia con la anterior es la inclusión del elemento covid-19.