- Los líderes de los Estados miembros de la Unión Europea (UE) debatirán la próxima semana una propuesta que aumenta el control de los países sobre la entrega de las ayudas del fondo de recuperación, pero mantiene la cantidad total planteada por la Comisión Europea, 750.000 millones de euros.

El presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, presentó ayer la iniciativa, elaborada tras mantener reuniones bilaterales con todos los jefes de Estado y Gobierno, que se verán en Bruselas el 17 y 18 de julio para intentar acordar el fondo de recuperación tras la pandemia y el presupuesto plurianual de la UE para el periodo 2021-2027. La propuesta de Michel mantiene también la proporción entre subvenciones a fondo perdido (500.000 millones de euros) y préstamos (250.000 millones) dentro del fondo "para evitar sobrecargar a los Estados miembros con un alto nivel de deuda", lo que "sería no solo un problema para ellos, sino para el mercado único", según explicó.

Para acceder a las ayudas del fondo de recuperación, que se financiará con la emisión de deuda común, los países deberán presentar a la Comisión planes de "recuperación y resiliencia" para el periodo 2021-2023. Los Estados miembros deberán después dar luz verde a esos planes por mayoría cualificada, una novedad introducida por Michel que podría satisfacer a los socios comunitarios más reacios al fondo, como Holanda, Suecia, Dinamarca y Austria, que pedían una condicionalidad más estricta para las ayudas. En sus planes, los Gobiernos especificarán las reformas e inversiones que pretenden realizar durante esos tres años y deberán tener en cuenta las recomendaciones económicas que les hace Bruselas cada año.

En 2020, esas recomendaciones se han adaptado para tener en cuenta los efectos de la pandemia, pero en los años anteriores solían pedir aplicar reformas estructurales. Preguntado por si se tendrán en cuenta solo las recomendaciones de 2020 o también las de años anteriores, Michel consideró "importante poner sobre la mesa lo que fue recomendado durante los últimos años", pero admitió que los líderes deberán debatirlo en la cumbre. También se valorará la contribución de los Estados a las transiciones ecológica y digital. Los países deberán cumplir con los objetivos fijados en los planes para recibir desembolsos.

El presidente del Consejo también plantea cambiar los criterios para la distribución de las ayudas del fondo, de modo que el 70% del dinero se comprometerá entre 2021 y 2022 y se repartirá siguiendo los criterios que había fijado la Comisión, que tenían en cuenta el PIB, población y tasa de paro entre 2015 y 2019 de los Estados. El restante 30% se comprometerá a partir de 2023 y se asignará en función de la caída del PIB que haya registrado cada país en 2020 y 2021. El objetivo es que haya un "vínculo real entre la crisis y el plan de recuperación y asegurar que el dinero va a las regiones y sectores más afectados", según Michel. Por ese motivo, en 2022 se hará una revisión de los planes para tener en cuenta el cambio en los criterios de distribución para 2023.

Varios países habían solicitado modificar los propuestos por la Comisión porque consideraban que era injusto tener en cuenta el paro previo a la pandemia. Según la distribución de Bruselas, España sería el segundo mayor beneficiario del fondo con 140.446 millones.

Michel sugiere, por otra parte, adelantar la devolución del principal y los intereses de la deuda emitida para financiar el fondo a 2026 (la Comisión planteaba empezar en 2028), lo que le lleva a proponer nuevos recursos propios para el presupuesto europeo con el fin de sufragar estos costes. En concreto, propone introducir ya en 2021 un gravamen sobre el plástico no reciclado y en 2023 un mecanismo de ajuste del carbono en frontera, así como una tasa digital europea.

Condiciones para el acceso. Michel introduce un sistema que condiciona el acceso a los fondos del presupuesto y del fondo de recuperación al respeto del Estado de Derecho. Si se detectan deficiencias en este, la Comisión propondrá medidas que los países en el CE deberán aprobar por mayoría cualificada.

Una reserva de 5.000 millones. El presidente del CE propone crear una reserva de 5.000 millones de euros para apoyar a los países y sectores económicos más afectados por la salida del Reino Unido de la Unión Europea.

-2%

Mientras que el fondo de recuperación mantiene su montante original, el presidente del CE, Charles Michel, reduce a 1,074 billones de euros el presupuesto para 2021-2027, lo que supone un 2,36% menos que los 1,1 billones planteados por la CE. El recorte, sin embargo, es menor que el reclamado por los países que piden unas cuentas menos ambiciosas.