- El Gobierno prevé aprobar hoy viernes un nuevo fondo dotado con 10.000 millones de euros para ayudar a las empresas viables con problemas de solvencia derivados de la crisis del covid-19, junto a una nueva línea de avales del ICO de hasta 40.000 millones de euros para impulsar la inversión empresarial. Junto al nuevo fondo, el Consejo de Ministros extraordinario prevé dar luz verde a otra línea de avales del ICO de 40.000 millones para facilitar la financiación, al Plan Renove dotado con 250 millones de euros y estudia medidas referidas al ámbito regulatorio de las aerolíneas.

El nuevo fondo para ayudar a las empresas del sector industrial se articulará a través de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), adscrita al Ministerio de Hacienda, con el fin de ayudar a las empresas viables en las que hayan surgido problemas de solvencia con motivo de la crisis derivada del covid-19.

Entre las opciones que baraja el Gobierno, y que se detallarán hoy, no se descarta la posibilidad de entrar a través de SEPI en el accionariado de alguna de estas empresas de manera transitoria y durante una duración determinada, la compra de deuda u otro instrumento convertible en capital. No obstante, el apoyo a la solvencia por estas vías se produciría como último recurso y a petición de las propias empresas, aunque desde el Ejecutivo precisan que no se tiene por qué entrar necesariamente en el capital de las empresas para asegurar su solvencia.

Desde el Ejecutivo explican que con el nuevo fondo se imitan los pasos dados por otras grandes potencias de la UE, como Alemania y Francia, que han aplicado fondos y ayudas estatales para ayudar a las empresas industriales en su solvencia.

Este monto de 10.000 millones de euros se encuadra en el marco del anuncio realizado este jueves por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de un nuevo paquete de ayudas financieras de 50.000 millones de euros para empresas y autónomos. Así, al fondo de 10.000 millones de euros para rescatar a empresas viables se sumará a otra línea de avales del Instituto de Crédito Oficial (ICO) dotada con 40.000 millones de euros para impulsar la inversión empresarial y que las entidades faciliten la financiación, principalmente a pymes y autónomos, contribuyendo así al mantenimiento del tejido productivo en la nueva fase de reactivación económica.

El pasado 17 de marzo, el Gobierno aprobó una línea de avales del ICO de hasta 100.000 millones para que las empresas pudiesen afrontar los problemas de liquidez derivados del covid. El presidente Sánchez subrayó que se han registrado 500.000 operaciones (10.000 operaciones al día) a través de esa línea de garantías, que podían solicitar hasta el 30 de septiembre de forma exclusiva las empresas afectadas por los efectos económicos del covid-19, siempre que los solicitantes no estuvieran en situación de morosidad a 31 de diciembre de 2019 y en procedimiento concursal a 17 de marzo de 2020.

Precisamente el martes, el Gobierno reasignó 28.000 millones de euros en avales a través del ICO que no se habían consumido, destinados principalmente a autónomos y pymes, una vez acabado el plazo del 30 de junio.

De igual forma, el Consejo de Ministros dará luz verde al Plan Renove, dotado con hasta 250 millones de euros, que busca fomentar la renovación del parque automovilístico y, según recoge el Plan de Impulso a toda la cadena de valor del Sector de Automoción, se destinará a ayudas a la adquisición de los modelos más eficientes, pero bajo un principio de “neutralidad tecnológica”, de forma que también se subvencionará la adquisición de modelos de combustión (diésel y gasolina).

La compra de turismos con etiqueta energética cero por parte de particulares o autónomos se subvencionará con 4.000 euros, mientras que si se compra un modelo Eco se recibirán entre 600 y 1.000 euros y entre 400 y 800 euros si se adquiere un coche con etiqueta C (combustión). Para poder solicitar las ayudas de este plan, los turismos adquiridos no podrán tener un precio de más de 35.000 euros.

La mano de Nadia Calviño. Pasada la emergencia de las primeras etapas de la epidemia de coronavirus, los expertos consideran que el programa que aprobará hoy el Consejo de Ministros extraordinario es más de ataque que defensivo. Es el llamado plan Calviño para la reactivación para la economía y el empleo. Mientras los grupos políticos siguen negociando el dictamen de conclusiones de la Comisión de Reconstrucción en el Congreso, la vicepresidenta tercera ha cogido el toro por los cuernos y lleva hoy al Consejo un ambicioso plan en el que lleva trabajando con su equipo varias semanas.