- La administración vasca sigue moviendo la manivela del consumo para paliar el parón económico causado por el coronavirus. En este caso el Gobierno Vasco activa, a través del Ente Vasco de la Energía (EVE), ayudas para el cambio de ventanas y la compra de nuevos electrodomésticos que beneficiarán a entre 22.000 y 27.000 hogares. Más allá de la cuantía presupuestaria global, unos 5 millones de euros, los nuevos planes Renove pretenden enviar una señal de alivio tanto para el comercio como para las empresas de reformas y contribuir a reactivar el gasto de las familias.

Con prácticamente todo el mundo entre paralizado y a medio gas, la demanda interna se presenta como la única alternativa para mantener la actividad económica. De ahí que los gobiernos estén apostando fuerte por incentivar el consumo en un momento en el que la incertidumbre empuja en dirección contraria. Los planes Renove del Gobierno Vasco como el de vehículos o estos últimos de ventanas y electrodomésticos tienen además el eje común de mejorar la eficiencia energética y reducir la contaminación.

Así lo destacó ayer el director general del EVE, Iñigo Ansola, en la presentación de las ayudas. "Estos nuevos planes tienen un fuerte impacto en la ciudadanía. Se trata de inversiones de calado y permiten una mejora sustancial de la calidad y la comodidad de la vivienda", dijo Ansola en referencia a las operaciones enfocadas a la renovación de los electrodomésticos y al cambio de ventanas. Dos decisiones que, por su naturaleza y su coste económico, tienden en muchas ocasiones a aplazarse y más aun en una coyuntura económica difícil como la actual.

Para mover el mercado el Gobierno Vasco activa estímulos en las dos direcciones, repartidos en dos paquetes de 2,5 millones. En el caso de las ventanas se cubrirá hasta el 25% del coste de la obra, con una subvención máxima de 1.500 euros. La ayuda va enfocada únicamente a la colocación de ventanas y materiales de alta eficiencia energética (deberán contar con el sello CE y al menos doble acristalamiento), tanto de madera, pvc o aluminio con rotura de puente térmico. El EVE especifica que el cambio se limita en todo caso a la vivienda habitual situada en la CAV, aunque la ayuda la podrá pedir tanto el propietario como el arrendatario. Las solicitudes podrán realizarse a partir de mañana 1 de julio en la página web del EVE y, advierte este organismo, las concesiones se resolverán por orden de presentación de la documentación requerida.

Por otro lado, se habilitan ayudas para la compra de electrodomésticos como frigoríficos y congeladores, lavavajillas y secadores y hornos, siempre que cuenten con la calificación de eficiencia A+++ o A++. En el caso de los hornos se permite únicamente la nota A+. Como en el caso de las ventanas, el Gobierno Vasco cubrirá una cuarta parte del precio, con un tope de entre 100 y 130 euros dependiendo de la clase energética del equipo (100 para los A++ y 130 para los A+++).

El EVE informará de la lista de comercios que se sumen al plan, explicó Ansola, de manera que serán estos los que deberán tramitar la ayuda en el momento de la compra así como la retirada del electrodoméstico a sustituir. El Ejecutivo espera promover la compra de entre 20.000 y 25.000 nuevos electrodomésticos y el recambio de ventanas en unos 2.000 hogares. Ansola aclaró que ambos planes son incompatibles con otras ayudas del mismo tipo tanto del Ejecutivo vasco como de otras administraciones.

Hay que destacar por ejemplo que la Diputación de Bizkaia ha aprobado ventajas fiscales para los contribuyentes que cambien las ventanas en su vivienda habitual, ahorro que en principio sí está regulado como compatible con el cobro de subvenciones, aunque su importe se restará a la deducción.

En la presentación de los nuevos renove estuvo también Jon Sáenz, presidente de la asociación de comerciantes de electrodomésticos, quien lanzó un inesperado mensaje de optimismo en relación a su sector. "Hay una explosión de demanda que nos ha sorprendido a todos", señaló Sáenz, que explicó que desde que se puso fin al confinamiento las tiendas de electrodomésticos viven un momento dulce. "El mes de junio refleja un movimiento inusual en los últimos años", celebró.

Las medidas impulsadas por el EVE van a servir para dar continuidad a este repunte, y beneficiarán tanto a vendedores como a fabricantes, valoró Sáenz. Aunque Euskadi ha perdido relevancia como productor, sobre todo a raíz del desplome de Fagor Electrodomésticos, sí cuenta con una red importante de pequeños fabricantes de componentes. Según Sáenz, las ventas se mueven en niveles muy inferiores a los que había antes de la crisis de 2008, pero en los dos últimos años se venía observando una recuperación que, pese a los síntomas positivos, parece difícil de sostener en 2020 a causa de la pandemia.

2.000 operaciones. El presupuesto habilitado por el EVE, 2,5 millones en este área, permitirá la renovación de ventanas en unos 2.000 hogares vascos. El máximo son 1.500 euros por casa, pero no todas accederán al máximo ya que se financiará el 25% de la obra.

Condiciones de aislamiento. Se exige marcado CE, permeabilidad al aire al menos Clase 3 y doble acristalamiento, entre otros requisitos. La ayuda se puede pedir desde el 1 de julio y hasta el 30 de noviembre o hasta agotar presupuesto.

Hasta 130 euros. Se financiará el 25% del nuevo electrodoméstico con un máximo de 130 euros en frigoríficos, lavadoras y lavavajillas de máxima eficiencia (A+++) y de 100 en los A++.

El director del EVE recordó que el cambio de ventanas y electrodomésticos permite una mejora sustancial en la comodidad y en el ahorro energético de la casa.